Arrimadas asume los errores pero sin cambios ni ceses
Inés Arrimadas quiere evitar abrir su primera crisis interna por el desastre de las elecciones catalanas y está aguantando las presiones dentro de Ciudadanos para pasar página a este nuevo hundimiento del partido naranja en las urnas sin cambiar la estrategia ni el equipo, como le piden muchos dirigentes. Está convencida de que la estrategia es la correcta y de que en el núcleo duro de dirección “no sobra nadie”, refiriéndose a la dimisión del responsable de la campaña de las catalanas y vicesecretario primero, Carlos Cuadrado, que pidió el lunes el coordinador autonómico de la Comunidad de Valencia, Toni Cantó.
Lo hizo en reunión del comité ejecutivo, convocado de urgencia para analizar el descalabro de Cs en Cataluña, una cita en la que durante cinco horas hubo muchas críticas a la estrategia electoral, especialmente de Cantó, de la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, y de la consejera de Cultura de Madrid, Marta Rivera, que pidieron responsabilidades a Cuadrado.
No así al candidato, Carlos Carrizosa, cuyo liderazgo en Cataluña, como el de Arrimadas, nadie puso en cuestión. En la reunión, Arrimadas, por primera vez, reconoció que los resultados de los comicios han sido “muy malos”.
También le dio una vuelta a las primeras explicaciones que ofreció para justificar este fracaso y en lugar de echar sin más toda la culpa a la elevada abstención, admitió que uno no pasa de ser la primera fuerza a la penúltima “sin cometer muchísimos errores”. Lo que no concretó fue qué errores: “No es fácil, ojalá hubiera una cosa concreta que si la cambiamos, solucionamos todos los problemas”, recalcó, insistiendo además en que todos coincidieron en que hay que seguir implantando el nuevo proyecto que ella lleva dirigiendo apenas un año porque “es más necesario” que nunca.
Un proyecto que está determinada a mantener en su esencia pese al malestar de muchos dirigentes, que tenían la esperanza de que fuera receptiva a esos cambios que reclaman porque algunos temen que si no lo hace, el partido acabará esfumándose.