El TC suspende la derogación de la ley autonómica de memoria
La memoria democrática vuelve a ser escenario de batalla política para Aragón. El Tribunal Constitucional paralizó ayer cautelarmente la derogación de la ley de memoria democrática de Aragón, primera gran victoria ideológica del Gobierno PPVOX-PAR en la comunidad. Una acción que frena la política memorialista ejercida desde el gobierno aragonés, quien acató la decisión de la justicia, pero solicitó de manera inmediata el alzamiento de la medida.
La decisión del Constitucional se toma de manera automática, ya que fue el propio Gobierno central el que recurrió la mencionada derogación. Fue una de las movilizaciones legislativas que Moncloa anunció contra las derogaciones de PP y Vox. Según el Constitucional, la ley aragonesa de derogación podría vulnerar los derechos de las víctimas del franquismo, además de ser contraria a las competencias estatales. Al haber invocado el Gobierno el artículo 161.2 de la Constitución, queda suspendida de forma automática y temporal esa ley que deroga la norma que estaba vigente en Aragón desde 2018.
La comunidad autónoma que preside Jorge Azcón fue pionera en la derogación de esta norma, con polémico anuncio el día 20 de noviembre (fecha de la muerte del dictador Francisco Franco). También lo fue en el anuncio del plan de concordia, la política memorialista que sustituirá a la ley de memoria democrática de Aragón. Mientras que en la comunidad se quedará en el rango de plan, en la Comunidad Valenciana y en Castilla y León sí se pretende que esta acción memorialista llegue al rango de ley.
No tardó en llegar la respuesta del Gobierno de Aragón. Fuentes del Ejecutivo autonómico defendieron que, bajo su criterio, la ley de derogación es «plenamente constitucional». «Se tramitó desde la más escrupulosa legalidad y las Cortes de Aragón tienen autonomía y derecho para derogar sus propias normas», destacaron.