Modric prueba a Kane
Inglaterra y Croacia reeditan en Wembley la semifinal que jugaron en el Mundial de 2018
Han pasado tres años desde el Mundial de Rusia, pero Inglaterra y Croacia no consiguen olvidarse la una de la otra. Aquella semifinal, en la que hubo tensión de más por ambas partes, sigue teniendo eco hoy en día, y, pese a que la selección de Luka Modric no está al mismo nivel que entonces, nadie en ese vestuario olvida un pique que durante los últimos años siempre ha aportado una motivación extra. El ‘10’ del Real Madrid, que llega después de una temporada excelsa, pero agotadora, medirá a los pross de Harry Kane, un jugador llamado a protagonizar una de las bombas del verano.
Por el camino, será interesante saber la idea que tiene Gareth Southgate para esta selección. Arriba tiene perfiles extraordinarios pero muy similares, es decir, el de jugadores rápidos y con muchísimo talento, pero también muy jóvenes. Si el seleccionador inglés consigue darles ese último toque de cocción que puede faltar a más de uno para las grandes citas, sin duda Inglaterra es una de las grandes favoritas para llevarse el torneo, aunque siga un paso, o dos, por detrás de Francia.
La duda en Wembley estará, por ejemplo, en si Trippier se impone a Walker, si Shaw desbanca a todo un campeón de Europa como Chilwell o si Grealish consigue ganarse la posición frente a los Foden, Saka, Rashford y Jadon Sancho. Sterling, que no ha hecho una temporada especialmente brillante, también puede terminar cayéndose por la fuerte competencia en la delantera.
De fondo, las 22.500 personas que podrán estar en el estadio londinense gracias a la excelente campaña de vacunación del Reino Unido, donde tres de cada cuatro adultos británicos ya han sido pinchados al menos con la primera dosis. Como curiosidad, está por ver cómo se toman las gradas no sólo la decisión de Croacia de no arrodillarse en apoyo al movimiento Black Lives Matter, como sí harán los ingleses, sino también cómo reaccionan ante el gesto de los suyos.