Un gran Lugo desarma al Zaragoza de Idiákez
Golazo antológico de Pita desde 50 metros
Javi López llegó a La Romareda cuestionado y se marcha a casa más reforzado que nunca. Justo al revés que Imanol Idiákez, cuya aura ha quedado seriamente oscurecida tras la debacle frente al Lugo, una derrota que hace daño de verdad. El Real Zaragoza, hay que decirlo alto y claro, fue un completo desastre, un equipo sin dirección, equivocado y sin soluciones, al que el Lugo, magnífico en la primera mitad, le dio un repaso en todos los órdenes y le trasladó una montaña de dudas que ya veremos si es capaz de resolver su entrenador.
Idiákez se decantó por Buff para suplir al lesionado James en el ala izquierda del rombo y no movió nada más frente a un Lugo que salió a esperar y a que el Zaragoza se equivocase. Y el equipo aragonés, impreciso, lento e incómodo desde el principio, no dejó de equivocarse. Una y otra vez. Primero una pérdida, luego otra y a la tercera Cristian Álvarez ya tuvo que salvar un gol cantado en un mano a mano con Cristian Herrera. Pero el Lugo ya se había desatado y tres minutos después, en el 21, Pita marcó el gol de la jornada con un disparo maravilloso desde 50 metros: se adelantó a un mal despeje de Zapater, cruzó la divisoria, vio al portero adelantado y abrió el marcador con una comba excepcional. Una verdadera obra de arte.
El 0-1 agigantó todavía más al Lugo, que pudo sentenciar el partido en el 26’ con un tiro libre de Cristian Herrera que se estrelló en el poste, y después con dos oportunidades muy claras de Dongou (40’) y de Iriome (41’).
Idiákez dio entrada a Papu por Buff tras el descanso y el Zaragoza salió con otro aire del vestuario, pero fue puro fuego de artificio, porque el Lugo resolvió el pleito en su primer contragolpe. Dongou, en fuera de juego por dos centímetros, coronó su gran tarde con un gol de oportunista que no celebró por su pasado zaragocista. Un gol definitivo que acabó de destapar todas las miserias del Zaragoza y le hizo justicia a los méritos del Lugo, que ayer fueron muchísimos.