Lucas Vázquez renovación enquistada
El club es pesimista sobre su continuidad y a día de hoy está más cerca su salida a final de curso
Lucas Vázquez está, a día de hoy, más cerca de irse del Real Madrid que de ampliar su contrato, que finaliza el próximo 30 de junio. Según ha podido saber AS, su renovación ha entrado en una fase de punto muerto que tiene difícil solución, porque ahora mismo existen otras prioridades dentro del club debido a los problemas económicos causados por la pandemia.
Las conversaciones con el entorno de Lucas Vázquez comenzaron hace varias semanas, porque la voluntad de Zidane, tal y como ha manifestado públicamente, es que el gallego continúe. Sin embargo, la primera oferta no fue del agrado del jugador y en el club tienen muy claro que hay otros problemas más urgentes por resolver. De hecho, uno de esos asuntos a tratar es una rebaja salarial a los trabajadores que afectará también a la primera plantilla.
Por eso, no se van a hacer locuras en las renovaciones. Menos aún en el caso de Lucas Vázquez, porque hace apenas unos meses se contaba con que los caminos del gallego y del equipo blanco se separaran este verano, cuando acabara la vinculación contractual que les une.
Su buen rendimiento esta temporada ha provocado que se ponga sobre la mesa la opción de su continuidad, aunque dentro del club sigue habiendo voces que dan su etapa por finalizada. Lucas tiene 29 años y consideran que el hueco en ataque que dejó Cristiano debe ser ocupado por los jóvenes con los que se ha reforzado el Madrid en las últimas temporadas (Vinicius, Rodrygo, Brahim...). La única forma de que crezcan es con minutos y muchas de esas oportunidades se las araña en la actualidad el canterano gallego.
Lateral. Los problemas físicos de Carvajal, unidos a la falta de confianza de Zidane en Odriozola, le han dado a Lucas Vázquez un protagonismo inesperado esta temporada, alternando partidos como lateral y como extremo. Suma 1.655 minutos, el octavo que más de la plantilla. Ocupa un rol importante en el equipo, aunque su renovación es una opción cada vez más complicada...
En verano ya me lo avisaron. “Lucas se va a tener que ir. No le gusta al presidente y en el club consideran que está quitando minutos a Rodrygo, además de obligar a Brahim a salir cedido”. Me pregunto si lo importante es la edad o tu origen futbolístico. Si eres canterano parece que has nacido con una tara. En vez de presumir de La Fábrica como en los felices 80, este chaval que ayudó al último ascenso del Castilla a Segunda no termina de entrar por el ojo del Star-system. Es gallego, no sube vídeos molones en Instagram y carece de un agente que lo ponga en valor cada tres semanas. Lucas es un alumno aplicado que acepta el rol que le toca. Si juega de extremo, se sale en San Siro ante el Inter y deja con el molde a Conte con un chutazo espectacular al poste. Si se lesiona Nacho en el Camp Nou, Zidane le pone de lateral derecho de emergencia y cierra esa banda hasta lograr que Ansu Fati apenas volviese a aparecer en todo el Clásico.
Por eso, Zidane lo quiere en su tropa. Sí o sí. Pero en el club vislumbran un futuro cercano, desde este verano, con un Madrid sin Zizou. Por eso quieren ir quitando piedras de la mochila del marsellés. Lucas no firmará una renovación low cost como si fuera un becario que acaba de salir del filial. Han aprovechado su único mal partido, el de Málaga, para ponerle la proa. La meritocracia ha muerto.
En el Madrid se confía en la progresión de jóvenes como Vinicius, Rodrygo o Brahim
Petición Se contaba con su salida, pero Zidane reclamó un esfuerzo