El rapero Drake, el Spike Lee 2.0 de los Raptors
■ La primera fila del Scotiabank Arena de Toronto, justo al lado del banquillo de los Raptors, cuenta desde hace años con un espectador de lujo: Aubrey Drake Graham (1986). Conocido simplemente como Drake en el mundo artístico, el rapero canadiense es un habitual de los partidos del equipo del Norte... y un dolor de cabeza para los rivales. El pívot de los Cavaliers Kendrick Perkins casi llega a las manos con él en los pasados playoffs y, en estos, Embiid y Antetokounmpo han sido las dianas de sus mofas. El pívot camerunés, incluso, sufrió un baile burlesco de la expareja de Rihanna cuando los Sixers perdieron el quinto encuentro en Canadá.
“Drake es el Spike Lee 2.0”, comenta Reggie Miller, que durante su etapa con los Pacers y la fuerte rivalidad entre la rural Indiana y la glamurosa Nueva York, tuvo divertidos piques con el director de cine y seguidor incondicional de los Knicks. Tanto Lee como el músico tienen algo más en común que el baloncesto: sus extravagantes chaquetas.
Sus irritantes declaraciones le permitieron conquistar el título de celebridad más molesta de la NBA para la web estadounidense Complex. La Liga, incluso, solicitó a Toronto que pusiera límites a esa clase de aficionados famosos que tanto han gustado siempre a la organización norteamericana. Porque Drake es a los Raptors, lo que Jack Nicholson a los Lakers y, claro, Spike Lee a los Knicks.