El arzobispo tiene «la esperanza» de poder celebrar un Corpus «normal»

El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, aseguró ayer que alberga «la esperanza» de que la festividad del Corpus Christi se pueda celebrar este año «con normalidad» y con presencia en la calle y van a rezar por ello. Confesó que es «muy duro» tanto para él como para toda la ciudad de Toledo que el Corpus no se pueda festejar como siempre debido a la pandemia. De lo contrario, habrá que aceptar la situación «por el bien de la sociedad y de todas las personas». «Viviremos con gozo lo que tengamos que vivir para que se pueda cumplir la normativa sanitaria», añadió.

En este contexto, recordó que la Semana Santa sí que por segundo año consecutivo no se va a poder desarrollar «como nos gustaría» y «las pobres cofradías y hermandades» se van a quedar otro año sin desfilar por las calles.

Sin embargo, lo esencial

«va a seguir siendo lo mismo», pues en el templo las imágenes se van a adornar y se va a hacer «todo lo que sea» para cuidar la Semana Santa «como si fuese a salir a la calle», teniendo en cuenta que «lo sustancial» es la celebración en el templo y esa se va a hacer con normalidad.

Respecto a la vacunación a los sacerdotes, el arzobispo dijo que «por supuesto que deberían vacunarse cuando se crea oportuno» y «nunca exigiendo ningún privilegio», ya que son personas «que han estado en contacto y están en contacto con esta realidad» y muchísimos de ellos por edad o porque son vulnerables deberían vacunarse.

«No sé si habrá habido un colectivo como el de los sacerdotes que esté tan en contacto con estas realidades. Uno de ellos decía que había enterrado a más de cien personas y en algunos de esos entierros estaba casi solo con la funeraria», comentó Cerro Chaves, que ha subrayado cómo la iglesia ha cumplido de un modo «estricto» la normativa y los sacerdotes han sido «modélicos».

Finalmente, incidió en su ofrecimiento de la catedral de Toledo y otros servicios de la iglesia para acometer una vacunación masiva.