El Senado reprueba al ministro del Interior por el caso Barbate
▸ Es el segundo reproche parlamentario contra Marlaska tras el del año pasado en el Congreso
El Senado reprobó ayer al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, tras una moción impulsada por el PP por su «nefasta gestión» en la lucha contra el tráfico de drogas y la falta de medios de la Guardia Civil en Barbate (Cádiz), donde el día 9 una narcolancha asesinó a dos agentes e hirió a otros dos. El PP hizo valer así su mayoría absoluta en la Cámara Alta. No obstante, la votación reveló abstenciones de dos senadores de Bildu, seis de ERC, tres de Junts, uno de Coalición Canaria y otro de Geroa Bai, todos ellos socios del Gobierno. En este contexto, el PP pide a estos partidos que se mantengan firmes en su posición y no caigan en cesiones del PSOE para proteger al ministro en otra eventual reprobación en el Congreso.
Los populares denunciaron en el Senado que Interior desmanteló una unidad de élite de la Guardia Civil creada para la lucha antidroga en el Campo de Gibraltar, el Organismo de Coordinación del Narcotráfico (OCON) Sur.
El PP vincula la decisión a «la presión de Marruecos» y sugiere que se «manipularon pruebas» contra algunos mandos de la unidad para acusarles de revelar secretos y favorecer el cierre de OCON Sur. La oposición reclama el cese del ministro, pero él se enroca en el cargo. La portavoz popular en el Senado, Alicia García, culpó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de mantenerle a pesar de estar tan cuestionado. «Utiliza a sus ministros como escudos humanos y a su partido para someterlo al independentismo con tal de mantenerse en el poder», reprochó García.
La ofensiva del PP fue simultánea en el Congreso, donde la oposición también pidió explicaciones y exigió al Gobierno declarar Zona de Especial Singularidad el Campo de Gibraltar. Los populares Esteban González Pons, Miguel Tellado, Elías Bendodo y Ana Belén Vázquez, así como Pepa Millán, portavoz de Vox en la Cámara Baja, protagonizaron sendos cara a cara contra el ministro del Interior.
Marlaska no asistió a su reprobación en el Senado, pero se defendió de los ataques desde el Congreso: «Lo vuelvo a explicar, aunque me temo que seguirán con sus bulos, mentiras y desinformación. El OCON Sur no desaparece: sus 150 efectivos, sus bases operativas y sus recursos se integran en la estructura de la Policía Judicial de las comandancias de la zona afectadas por el plan especial de Gibraltar. Es un cambio de estructura que además lo decide la Guardia Civil, que tiene autonomía, buscando una mayor eficacia».
PP y Vox también le reprocharon prohibir los homenajes a los agentes fallecidos, lo que el propio Marlaska negó tajantemente, y no visitar Barbate en «una actitud cobarde e intolerable». El ministro iba a desplazarse al escenario del asesinato tras el suceso, pero al final decidió reunirse con altos cargos de la Benemérita en Cádiz. PSOE y Sumar contestaron con la fotografía de Feijóo y el narco gallego Marcial Dorado en un yate y contraargumentaron que fue el PP quien redujo el número de efectivos en esa zona en particular y en la Benemérita y la Policía en general. Marlaska también presumió de incrementar el número de agentes y uso la carta de su etapa como juez en la Audiencia Nacional. «La diferencia entre algunos que viajaban en barco con el narco es que este ministro del Interior lo ingresó en prisión», respondió.
La carta de Marcial Dorado
Marlaska tiene ya el dudoso honor de cargar con dos reproches parlamentarios. En febrero del año pasado, el Congreso le reprobó después del salto masivo en la valla de Melilla en junio de 2022, donde murieron al menos 23 personas, más del triple según las ONG. Aquella reprobación también fue impulsada por el PP y facilitada por los socios del Gobierno: ERC votó a favor mientras que Bildu y PNV se abstuvieron.
«Su reprobación ya se pidió en 23 ocasiones, fue reprobado ya en el Congreso por la muerte de 23 personas tras un salto de la valla de Melilla y ha sido condenado por vulnerar los derechos de los menores inmigrantes», recordó Luis Javier Santamaría (PP) en el debate del Senado. En enero, el Supremo consideró ilegal la ‘devolución en caliente’ de Interior de menores marroquíes que entraron de forma irregular en Ceuta tras saltar la valla el verano de 2021. Luego, Mari Mar Caballero, senadora de UPN, citó otro varapalo del Alto Tribunal, que en septiembre concluyó que el cese en 2020 del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos fue ilegal y le obligó a su reincorporación. «Su mala gestión tiene consecuencias y uno tiene que ser capaz de dar un paso atrás cuando es un clamor», dijo Caballero.