Nueva llamada a filas en Rusia: «Sé un hombre»
te a Rusia y criticando a Estados Unidos y la OTAN tanto en sus medios estatales como en la propaganda en las redes sociales. Pero el enquistamiento de la contienda y su cada vez mayor impacto en la economía mundial han obligado a Pekín a implicarse en el conflicto, presionada por Occidente.
Coincidiendo con el aniversario de la invasión, China presentó el pasado 24 de febrero un plan de paz de doce puntos que, si bien no condenaba la invasión, al menos pedía «respetar la soberanía de todos los países» y se oponía al «uso de las armas atómicas y al ataque contra las centrales nucleares», como viene amenazando Putin. Pero, de igual modo, recogía parte de sus demandas, como el levantamiento de las sanciones, y rechazaba la «mentalidad de la Guerra Fría» para que «la seguridad de una región no se consiga fortaleciendo o expandiendo bloques militares», en clara alusión a la OTAN.
Presión occidental
Aunque esta equidistancia entre agresor y agredido ha sido muy criticada por Occidente, la Unión Europea ha seguido persuadiendo a China para que medie en la guerra, sobre todo después del viaje del presidente Xi Jinping a Moscú para reunirse con Putin el 20 de marzo. Buena prueba de ello es el encuentro que, justo a la semana siguiente, el presidente español, Pedro Sánchez, tuvo en Pekín con Xi Jinping, al que siguió a principios de abril la visita del presidente francés, Emmanuel Macron, y de la presidenta la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Todos ellos apelaron a las buenas relaciones diplomáticas entre China y Rusia, y sobre todo a la amistad de Xi con Putin, para que Pekín se implicara más en la mediación y hablara también con Ucrania.
En el último de estos encuentros de alto nivel, el presidente chino recibió a mediados de este mes a su homólogo brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, quien llegó a Pekín con otra propuesta de paz bajo el brazo. A diferencia de la que presenta Occidente, la de Lula es más condescendiente con Rusia e incluso aboga por que conserve los territorios que ya ha tomado por la fuerza, incluyendo Crimea.
Al margen de esta proposición, rechazada por Ucrania, la llamada de Xi Jinping a Zelenski y el envío de un representante chino introducen una nueva pieza en el tablero y abren una puerta a la ansiada paz. a prueba de que los continuados intentos de movilizar soldados para enviar a luchar a Ucrania no están teniendo demasiado éxito se pone de manifiesto con las numerosas campañas de alistamiento lanzadas desde que el presidente Vladímir Putin decretó la «movilización parcial», en septiembre del año pasado. La que acaba de poner en marcha el Ministerio de Defensa ruso para tratar de reclutar militares voluntarios mediante contrato incluye un vídeo instando a ser un «hombre» auténtico y a comportarse como tal.
La filmación comienza en un supermercado y muestra a su encargado de seguridad intentando evitar que algún cliente se lleve algo sin pagar. Bajo acompañamiento musical de rock duro, aparece en la pantalla un texto que pregunta: «¿Acaso soñaste ser guardia de seguridad de un supermercado?». Con la misma música de fondo, se ve al monitor de un gimnasio instruyendo sobre ejercicios con pesas y esta vez la pregunta es «¿en eso está tu fuerza?».
El siguiente personaje es un taxista a quien la cuestión planteada es «¿acaso este es tu camino elegido?». «Pero tú eres un tío», prosigue el anuncio, «¡compórtate como un hombre!», sentencia el llamamiento intercalando imágenes de fornidos militares rusos, a los que se unen los tres protagonistas del vídeo.
LVarios reclamos
Al final, en la filmación surge un rótulo del Servicio de Contratación del Ministerio de Defensa de Rusia, con sus teléfonos de contacto, ofreciendo a los que acepten firmar un contrato un sueldo mensual «desde 204.000 rublos» (unos 2.400 euros), suma bastante alta en un país en donde el salario medio se sitúa en torno a los 70.000 rublos (menos de 800 euros).
Se han difundido muchísimos otros reclamos instando a los jóvenes a engrosar las filas del Ejército y acudir al frente ucraniano. En Moscú y en las principales ciudades del país se han colocado por todas partes vallas publicitarias con imágenes de soldados y explicando las excelencias de ser un «defensor de la patria».
No se ha quedado atrás en esta campaña el jefe de los mercenarios rusos del Grupo Wagner, Evgueni Prigozhin, quien protagoniza su propio clip rodeado de sus hombres armados hasta los dientes y profiriendo gritos de guerra a cual más viril e intimidatorio. «¡Muchachos, alistaos en el Wagner, somos un colectivo amistoso y aprenderás una profesión!», asegura.
Pero, a juzgar por los comentarios de los usuarios en relación con los vídeos, estas campañas de alistamiento no parecen estar seduciendo a muchos. Las redes sociales, pese a los intentos de censurar sus contenidos por parte de las autoridades, informan del alto número de bajas que el Ejército ruso y, sobre todo, los Wagner están sufriendo en Ucrania.
Teniendo en cuenta que leyes aprobadas recientemente castigan duramente con abultadas multas y hasta con penas de cárcel por «denigrar» a los militares y también a los mercenarios que combaten en Ucrania, nadie se atreve ante un periodista a criticar las campañas de movilización. En Moscú casi nadie quiere hablar del asunto en la calle y los que lo hacen se muestran a favor de que «la juventud tiene que salir de su letargo y mostrar que valen para luchar por su país», sostiene una mujer entrada en años al salir del metro presurosa y moviendo la cabeza hacia un cartel con la imagen de un paracaidista fusil en mano y con la «z» que simboliza la llamada Operación Especial Militar en el país vecino.
Medidas impopulares
Las tropas rusas intentan ahora obtener el mayor número de alistamientos para intensificar la ofensiva, pero sin tener que recurrir a una movilización general ni tampoco a los soldados de reemplazo, medidas ambas que serían muy impopulares. Una ley reciente adoptada en el Parlamento pretende facilitar la movilización, ya que se podrá convocar a los reservistas por vía electrónica, a través de un portal de los servicios públicos ruso (Gosuslugui).
Antes, la citación debía entregarse en persona al movilizado, lo que permitió que muchas personas pudieran eludir la primera oleada de movilización, cambiando de domicilio o saliendo al extranjero. Pero ahora, si los interesados se niegan a presentarse en la oficina del Comisariado Militar, no podrán viajar fuera del país y se exponen a perder el derecho sobre su vivienda, vehículo y hasta ver bloqueadas las tarjetas sim de su teléfono. Podrían tener también problemas para encontrar trabajo, dedicarse a los negocios o formalizar créditos bancarios.
Zelenski saludó «el importante papel de China en la restauración de la paz y para resolver la crisis a por medios diplomáticos»
Xi reiteró que «el respeto mutuo por la soberanía e integridad territorial» es la base de las relaciones que mantienen China y Ucrania
Desde que Putin decretó la «movilización parcial» para luchar en Ucrania, se han sucedido diversas campañas sin mucho éxito. La última apela a la hombría de los reclutas