¿Por qué un sucedáneo de Feria?
He estado en el centro y no podía dar crédito a lo que el Ayuntamiento está organizando para conmemorar la Feria de Abril. En Sevilla no hace falta que nos toquen las palmas, nos jaleamos nosotros solitos. Nuestra idiosincrasia se distingue por que nos gusta estar en la calle disfrutando de nuestro clima y de cualquier circunstancia que se nos ponga por delante. Pero este no es el caso ahora mismo. Se está luchando por lograr una estabilidad sanitaria y ya se ha visto en Semana Santa el desmadre que ha habido. Daba miedo ver las terrazas de los bares, las colas de las iglesias, agotadas todas las entradas para cualquier exposición... ¿Se imaginan la que se puede liar con la bebida y la juerga en la calle? No sé, con esta idea, a quién trata de complacer el Ayuntamiento, porque el ciudadano de a pie es más consciente de la situación que vivimos de lo que algunos puedan creer. social-populista a un fraile católico, más conservador que Balmes, que rumia sus contradicciones al amparo de una acartonada seriedad que el PSOE confunde con un mérito político. Gabilondo y Ayuso llegaron a donde están porque sus jefes de filas necesitaban más fidelidad que iniciativa: Ayuso, para evitar que surgiese un liderazgo alternativo antes de que Casado se hiciese con los mandos del PP; y Gabilondo, para evitar que el populismo de izquierdas consolidase el liderazgo de Carmena, quien, a pesar de ser la política más ineficiente que tuvo la estepa castellana, estuvo a punto de llevar al PSOE de Madrid a la pura irrelevancia. Así se explica que la batalla de Madrid tenga dos frentes endiablados, mientras Iglesias enreda lo que puede.