El Gobierno prevé repatriar este fin de semana a los tripulantes del naufragio
▶El superviviente que permanecía en el pesquero Robin M. Lee y los fallecidos llegaron ayer al puerto de Stanley, en las Islas Malvinas
Apesar de las festividades, ferias y demás celebraciones que se suceden a lo largo y ancho de Galicia en estas fechas, el trágico naufragio del buque Argos Georgia copó parte de los discursos que pronunciaron ayer las formaciones políticas. También mostraton su pesar los aficionados del Celta de Vigo, con pancartas recordando a los fallecidos: «El celtismo, con la gente del mar», y el arzobispo de Santiago, que encomendó al Apóstol a las víctimas y trasladó su solidaridad a sus familias y «a todas las gentes del mar».
El luto es reciente, como el dolor que mostraron los familiares de los fallecidos durante los minutos de silencio celebrados durante la noche del miércoles en Vigo y Baiona. Después de que los trece supervivientes del naufragio del Argos Georgia –seis de ellos españoles y cuatro gallegos– llegasen a tierra el pasado miércoles, a salvo, ayer fue el turno de los que no tuvieron tanta suerte.
La delegación del Gobierno en Galicia confirmó ayer que los pesqueros Robin M. Lee, en el que viajaba un superviviente y un fallecido, y el Puerto Toro, con los ocho fallecidos restantes a bordo, atracaron ayer por la tarde en el puerto de Stanley (Malvinas), según informó Ep. De los diez tripulantes españoles, hay seis supervivientes y cuatro de ellos son gallegos, tres de Ribeira (La Coruña) y uno de Pontevedra, además de una persona natural de Barcelona y otra de Albacete. A la espera de conocer el desenlace de los desaparecidos, dos de los fallecidos notificados son también naturales de Galicia: César Acevedo, patrón de pesca del barco natural de Vigo y Santiago Leyenda, el cocinero, procedente del pueblo costero de Baiona (Pontevedra).
Tanto el portavoz de las familias afectadas por la tragedia, José Manuel Pena, como el Gobierno, indicaron que los supervivientes del naufragio fueron atendidos por equipos de profesionales sanitarios del Hospital Memorial Rey Eduardo VII, que ya descartaron que pudiesen sufrir lesiones graves. Asimismo, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, afirmó que el Gobierno fletará un avión destino Argentina hoy para poder iniciar el proceso de repatriación de los tripulantes, que llegarán a España a lo largo de este fin de semana según las estimaciones del Ejecutivo. También se desplazará a Malvinas un diplomático de la División de Emergencia Consular para estar en contacto directo con los supervivientes y autoridades locales con la intención de agilizar el proceso de repatriación.
Clima desfavorable
Una vez garantizada su salud, los supervivientes tendrán que declarar ante las autoridades inglesas de las Malvinas, a cargo de la investigación sobre el incidente, para esclarecer los motivos del naufragio. De momento, solo ha trascendido la vía de agua señalada por los propios tripulantes en la llamada de auxilio previa al abandono del barco.
Su testimonio será clave, ya que son los únicos que pueden despejar las dudas debido a las condiciones climatológicas desfavorables que impiden una aproximación minuciosa al lugar de los hechos, Motivo por el que también se mantiene suspendida la búsqueda de los desaparecidos desde el miércoles, limitando en gran medida la capacidad de encontrarlos con vida.
Aunque los supervivientes siguen ingresados en el hospital, José Manuel Pena indicó que están todos «bien», salvo por heridas leves y contusiones. Lo más duro, en palabras del portavoz de las familias, es el daño «psicológico» que sufren tras una experiencia difícil de asimilar para los tripulantes.
El destino de los que faltan
«La información que nos han facilitado es que se va a intentar recuperar esa búsqueda en cuanto las condiciones
lo permitan», afirmó Albares respecto a la actual parálisis de las labores de rescate. Un optimismo que contrasta con las declaraciones de Stig Ervik, director ejecutivo de Ervik Havifske Holding, empresa noruega copropietaria de la armadora responsable del buque naufragado Argos Georgia.
En declaraciones recogidas por la agencia Reuters, Ervik afirmó que desde la compañía se encuentran «realmente tristes por las familias que han perdido a sus padres y maridos». Además, indicó que ya les han transmitido sus condolencias a los familiares de los muertos ya confirmados, así como a las de los desaparecidos, que están «presumiblemente muertos» tras la paralización de su búsqueda por la inclemencia del clima, según declaró el CEO de la empresa noruega. Sin visos de cuando se reanudará.
Rescate interrumpido El salvamento de los marineros que siguen desaparecidos continúa paralizado por la inclemencia del clima
Ervik Havifske Holding Desde la empresa noruega copropietaria del buque hablan de los desaparecidos como «presuntos fallecidos»