Dimite el director de Salud de Armengol por intervenir en la oposición de su hija
El socialista Juli Fuster se va «con la conciencia tranquila» pese a su condena
Juli Fuster, presentará su dimisión como director general del Servicio balear de Salud el próximo lunes, según han confirmado fuentes de Salud a ABC. El dirigente socialista abandona su cargo para «proteger la buena imagen» de la Conselleria de Salud y «evitar que se cuestione la buena labor en los procesos de oposiciones» del Servicio de Salud, departamento que dirigía desde 2015.
Su renuncia se produce horas después de que la justicia condenara al Govern balear por la intervención del propio Fuster en el concurso oposición de anestesia y reanimación, a la que se presentaron su hija y su yerno en 2019.
Fuster se va «con la conciencia muy tranquila» y asegura que «nunca actuó para favorecer a nadie». El próximo lunes presentará su renuncia formal a la consellera. Por su parte, el Govern de Armengol saca pecho y afirma que el cese de Fuster es una «nueva muestra de su compromiso ético».
La Sala de lo Contencioso del TSJB condenó al Govern balear por la intervención del director general del Servicio balear de Salud en el concurso oposición para cubrir plazas vacantes de facultativo especialista del área de anestesia y reanimación en el año 2019.
Uno de los aspirantes denunció que su examen no había sido calificado. El tribunal de las oposiciones entendió que no lo podía calificar porque había firmado la prueba y, en teoría, se exigía que fuera anónima para garantizar la igualdad entre los aspirantes.
El denunciante, representado por el abogado Javier Gutiérrez, alegó que ese requisito de anonimato no constaba en las bases de la convocatoria y pidió que se calificara su examen. Fue entonces cuando el propio Fuster, quien tenía la obligación legal de abstenerse por su relación de parentesco con dos de los aspirantes, rechazó el recurso de este aspirante y lo rubricó.
La sentencia, a la que ha tenido acceso ABC, reprocha a Fuster que no se abstuviera «máxime cuando era tan evidente» y considera relevante su intervención, ya que «excluyó a un competidor de su hija en el procedimiento selectivo en el que ambos participaban». La justicia obliga al IB-Salut a calificar el examen de este médico y se tenga en cuenta dentro de la oposición.
Según el abogado Javier Gutiérrez, no se respetaron las garantías mínimas de acceso a la función pública en condiciones de igualdad, a través de un sistema competitivo justo, basado exclusivamente en los principios de mérito y capacidad.
Para Gutiérrez, «el incumplimiento del deber de abstención constituye la quiebra del mandato constitucional que exige garantizar los principios de neutralidad e imparcialidad de los servicios públicos, para mantenerlos al cubierto de toda colisión entre los intereses particulares y los intereses generales».