El automóvil pide prudencia ante los ataques al diésel
Las patronales defienden que contamina menos que la gasolina
El sector del automóvil se unió ayer para defender al diésel en un momento en que el Gobierno estudia subir los impuestos a este carburante. Las patronales del automóvil Anfac (fabricantes), Faconauto (concesionarios) Ganvam (vendedores), Aniacam (importadores) y Sernauto (componentes) pidieron ayer en una carta conjunta «prudencia y moderación». «El diésel no contamina más que la gasolina. El diésel es el combustible más eficiente con menores emisiones de dióxido de carbono», sentencia la misiva, y pone de ejemplo que los coches diésel nuevos consumen un 25% menos y emiten un 15% por debajo del dióxido de carbono que realizan los vehículos equivalentes de gasolina.
En el documento, el sector alega que el principal problema proviene de los vehículos más antiguos, de más de diez años, que «con independencia de que sean diésel o gasolina», los niveles de «emisiones de Co2 y NOx y partículas son muy superiores». Por ello apuestan por retirar de la circulación los coches más viejos e ineficientes.
Subida de impuestos
El Gobierno tiene en mente equiparar progresivamente la tributación de los vehículos de gasolina y los de diésel, que ahora pagan menos. De esta forma, la idea es empezar el próximo año subiendo gradualmente ejercicio a ejercicio hasta que la tributación sea idéntica. De equipararse el tributo, los consumidores de diésel deberían pagar 40,07 céntimos por litro, 10 céntimos más.
Frente a ello, los productores apuntan lo siguiente: «Desde hace décadas, toda la cadena de valor que conformamos el sector español de automoción estamos realizando fuertes inversiones en I+D+i para poner en el mercado vehículos cada vez más limpios y eficientes. De ahí que hayamos conseguido que los vehículos nuevos diésel emitan un 84% menos de emisiones NOx y un 91% menos de partículas que los vehículos de hace 15 años».
Para poder reducir las emisiones, vendedores y fabricantes piden una «transición» que debe hacerse de una forma «progresiva y ordenada», con medidas y soluciones «consensuadas» que faciliten «la movilidad de los ciudadanos».
«En un mundo plagado de fake news (noticias falsas) como el que vivimos, conviene desmentir aquellas afirmaciones inexactas para evitar que, por repetición, acaben tomándose como verdaderas, con las graves consecuencias que ello conlleva», advierten.
Por ello, estas organizaciones recomiendan que «no se ataque ninguna tecnología ni se genere incertidumbre necesaria en la ciudadanía». Las ventas de vehículos diésel han caído con fuerza, después de los anuncios de impuestos: en el último año han caído un 23%. También ha contribuido a escándalos como el «dieselgate» de Volkswagen, que trucaba motores diésel que emitían por encima de la ley, o las críticas de la Comisión Europea a la tecnología ante opciones como el coche eléctrico y los problemas crecientes de contaminación de las grandes ciudades.
Sin embargo, las patronales del sector recuerdan que «penalizar a los coches diésel (aunque sean nuevos), lo único que está provocando es un incremento de las emisiones de CO2 ya que están siendo sustituidos por vehículos gasolina». «Ello nos aleja, a su vez, de los objetivos marcados por la Comisión Europea», zanja la carta.