La recuperación después del parto
El descanso, la buena alimentación y el apoyo de la familia son esenciales para que el cuerpo y la mente de la nueva mamá vuelvan a la normalidad
En la era donde el selfie es rey, de seguro, la memoria de tu teléEfono inteligente te alerta constantemente que no tienes más espacio. Cada día de tu embarazo está ahí. Deslizas las fotos hacia arriba y hacia abajo; y sonríes. Fue un periodo de preparación, espera, y tu cuerpo y tu mente cambiaron... Ahora, ya nació tu bebé, llegó el momento de recuperarte.
De acuerdo con el sitio web Women’s Health, los primeros días en casa después del parto son para descansar y recuperarse.
Necesitas dedicar toda tu energía en ti misma y en conocer a tu nuevo bebé. Aunque probablemente estés muy contenta y muchos familiares y amigos desean visitarlos, trata de limitar el número de visitas e intenta descansar lo más que puedas. No pretendas tener tu casa en perfectas condiciones. Notarás que lo único que haces es comer, dormir y cuidar de tu bebé. Trata de encontrar tu propio ritmo desde el primer día que vuelves a casa. Recuéstate o duerme una siesta mientras el bebé duerme. Permite que otros te ayuden y no temas pedir ayuda.
El proceso de recuperación, establece el sitio web Kid's Health, toma tiempo. Si te han practicado una cesárea, la recuperación será todavía más lenta, porque una operación requiere más tiempo de curación. Si no la tenías prevista, es posible que este cambio también te active cuestiones emocionales.
En los partos por cesárea, el dolor alcanza su mayor intensidad durante los primeros días que siguen a la operación y luego debe ir disminuyendo de forma gradual. El médico te indicará qué precauciones debes adoptar después de la operación y te dará instrucciones sobre cómo bañarte y cuándo podrád hacer ejercicios suaves y evitar el estreñimiento.
LOS CAMBIOS FÍSICOS:
Tendrás una secreción vaginal llamada loquios. Es el tejido y la sangre que recubrían el útero durante el embarazo. Al principio es profuso y de color rojo intenso y luego va disminuyendo en cantidad e intensidad del color hasta que desaparece después de unas semanas.
●Podrías tener hinchazón en las piernas y los pies. Reduce la hinchazón manteniendo los pies levantados el tiempo que sea posible.
Probablemente tengas estreñimiento. Trata de ingerir mucha agua y frutas y verduras frescas.
Es común tener dolores similares a los cólicos menstruales, especialmente si estás amamantando. La leche materna comenzará a bajar entre el tercer y sexto día después del parto. Incluso, si no estás amamantando, puedes notar que cae leche de los pezones y tener una sensación incómoda y de sensibilidad.
Sigue las indicaciones de tu médico en cuanto al nivel de actividad que puedes realizar durante las siguientes semanas.
Algunas mujeres comienzan a tener problemas de tiroide durante el primer año después de dar a luz. Esto se llama tiroiditis posparto, que suele comenzar con un cuadro de hipertiroidismo que dura entre dos a cuatro meses. La mayoría después presentan síntomas de una actividad tiroidea deficiente que puede durar hasta un año. En la mayoría de los casos, la tiroides vuelve a funcionar con normalidad cuando se cura. Pero, algunas desarrollan la enfermedad de la tiroides hipoactiva crónica, conocida como enfermedad de Hashimoto, la cual necesita tratamiento de por vida.
LOS CAMBIOS EMOCIONALES:
La tristeza posparto. Muchas madres experimentan irritabilidad, tristeza, llanto o ansiedad durante los primeros días. La tristeza posparto es muy frecuente y puede estar relacionada tanto con los cambios corporales (incluyendo los cambios hormonales, el agotamiento y las experiencias de parto inesperadas) como con la transición emocional que acompaña el cambio al rol de madre y la necesidad de adaptarse al bebé. Esta suele desaparecer en un plazo de 1 a 2 semanas.
La depresión posparto (DPP). Más grave y de mayor duración que la tristeza posparto, esta afección afecta a entre el 10 % y el 15 % de las madres y puede cursar con cambios en el estado de ánimo, ansiedad, sentimientos de culpa y tristeza persistente. Se puede diagnosticar hasta un año después del parto y es más frecuente en las mujeres con antecedentes personales y/o familiares de depresión y que están expuestas a múltiples factores estresantes.
En lo que se refiere a las relaciones íntimas, tú y tu pareja se pueden encontrar en situaciones diferentes. Es posible que tu pareja desee reanudar su vida sexual cuanto antes, pero tal vez no te sientas preparada ni recuperada, física ni emocionalmente. Los médicos suelen recomendar a que esperen varias semanas antes de mantener relaciones sexuales.