Senado aprueba proyecto de empleador único
El proyecto de administración fue ratificado sin enmiendas anoche por el Senado
Tras posponer la consideración de algunas enmiendas, el Senado apresuró anoche la aprobación del proyecto de ley que centralizaría el manejo de los recursos humanos en el servicio público al establecer al Gobierno como empleador único.
La mayoría del Partido Nuevo Progresista (PNP) determinó avalar la misma versión que ratificó la Cámara de Representantes para poner la medida en manos del gobernador Ricardo Rosselló Nevares cuanto antes.
La pieza fue aprobada en votación 21-5, solo con el favor de los senadores novoprogresistas. Las delegaciones del Partido Popular Democrático (PPD) y del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), al igual que el senador independiente José Vargas Vidot le votaron en contra.
No fue posible confirmar de inmediato con La Fortaleza si el primer ejecutivo estaría en posición de firmar el proyecto hoy mismo.
No obstante, antes que quedara aprobado el Proyecto de la Cámara 454 anoche, el senador novoprogresista Miguel Romero, presidente de la Comisión de Gobierno del Senado, confirmó a El Nuevo Día que próximamente presentaría otra legislación con las enmiendas que le quiso incluir a la medida, pero que no sometió para acelerar el trámite legislativo.
“Estoy trabajando en el lenguaje, pero es un lenguaje que no impide que el proyecto sea aprobado y no afecta los derechos conferidos por la propia ley”, destacó Romero.
El senador de la mayoría del PNP no precisó cuándo podría presentar la medida, pero estimó que será “lo antes posible”. Sin abundar los detalles, mencionó que procurará equiparar con el sector privado el período de licencia de lactancia de las empleadas gubernamentales para que no se limite a un año, y “clarificar” algunas disposiciones sobre las licencias sin sueldo para desarrollo profesional.
El proyecto crearía la “Ley para la Administración y Transformación de los Recursos Humanos”, y derogaría la Ley 184-2004, que actualmente regula el manejo de la empleomanía en el Gobierno.
Entre otras cosas, convertiría al gobierno en un empleador único a través de la creación de la Oficina de Administración y Transformación de los Recursos Humanos del Gobierno, que administraría el sistema centralizado de la plantilla gubernamental, que ahora se maneja individualmente, agencia por agencia. La nueva entidad sustituiría a la Oficina de Capacitación y Asesoramiento en Asuntos Laborales y de Administración de Recursos Humanos (OCALARH).
El Ejecutivo ha insistido en que la intención es generar eficiencias en el Gobierno, y colocar a los funcionarios donde se necesiten los servicios. La medida adopta el concepto de “movilidad”, que incluye traslados, ascensos, descensos y otras transacciones de personal entre agencias, corporaciones públicas, municipios y Alianzas Público-Privadas.
El presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, defendió el proyecto de administración de los ataques de las minorías parlamentarias al recalcar que el texto establece claramente que la política pública que se impulsa respeta el derecho a la sindicación de los empleados públicos y la negociación colectiva al amparo de la “Ley de Relaciones del Trabajo en el Servicio Público” (Ley 45-1998).
“El proyecto lo que ofrece en sus objetivos y política pública es la garantía para los trabajadores y trabajadoras, en blanco y negro. No podría interpretarse de otra manera”, aseveró Rivera Schatz.
El líder senatorial rechazó que la medida atente contra la clase trabajadora, y durante su turno de debate, destacó que en las gradas del hemiciclo no había voces opositoras, como en otras ocasiones ha ocurrido cuando se consideran proyectos controversiales.
“Junto a las otras (medidas) que se han aprobado, debe quedar claro que no se trata de poner sobre los hombros de nadie más cargas, se trata de todo lo contrario, de aliviar la carga del trabajador, de incentivar la industria, (incentivar) a esos que tienen empleo, al que no tiene empleo, se trata de darle la oportunidad aquí en Puerto Rico”, señaló Rivera Schatz.
No obstante, el senado Eduardo Bhatia, portavoz de la minoría del PPD, recordó que todos los sindicatos que comparecieron a la vista pública en la que se consideró la medida la rechazaron. “Todas las uniones y los grupos que representan a los empleados vinieron en contra de este proyecto. Entonces, cómo vamos a decir que es un proyecto para proteger el empleo público, y no un hay un empleado público que esté a favor de él”, sentenció.
El senador Juan Dalmau, del PIP, advirtió que la medida no puede verse de manera aislada, y dijo que, si se toma en conjunto con el resto de las leyes que ya ha firmado Rosselló Nevares, tendría “efectos devastadores” para los trabajadores. “Este proyecto se une a lo que son medidas que se han estado aprobando de manera aislada, que cuando se ven en conjunto, aunque su exposición de motivos diga que es para mejorar la condición económica o para mejorar el empleo, todas están dirigidas contra la fuerza laboral”, puntualizó Dalmau.
“Queremos cerrar el déficit evitando el despido de empleados públicos” LARRY SEILHAMER Senador del PNP “No quiero pensar que esta ley habrá de convertirse en una secuela de la Ley 7 y de la reforma laboral” CIRILO TIRADO Senador del PPD “Están aprobando legislación que aparenta ser aislada, pero en la suma tiene efectos devastadores” JUAN DALMAU Senador del PIP