Alfredo Rivera Pizarro: un apasionado de los bienes raíces
El corredor de bienes raíces y realtor comenzó su trayectoria profesional a los 19 años cuando se convirtió en el primer menor de edad a nivel mundial en obtener una licencia como corredor de bienes raíces.
Muchos corredores de bienes raíces anhelan lograr un cambio en la industria inmobiliaria, pero para Alfredo Rivera Pizarro, esta es la realidad que disfruta a diario.
El corredor de bienes raíces y realtor comenzó su trayectoria profesional a los 19 años cuando se convirtió en el primer menor de edad a nivel mundial en obtener una licencia como corredor de bienes raíces
Hoy día, con una trayectoria de 25 años, sus ambiciones siguen siendo las mismas: trabajar y educarse para servir a los demás en la experiencia inmobiliaria. “Una propiedad se tiene que vender, mercadear y representar de la mejor manera posible y para eso me gusta educarme siempre que surge la oportunidad”, comentó Rivera Pizarro, quien de una forma exitosa ha dirigido la Asociación de Productores de Hormigón, Asociación de Fabricantes de Bloques, Asociación de Industrias Productoras de Agregados y la Asociación de Restaurantes de Puerto Rico.
Asimismo, el experto cuenta con más de 1,000 horas dedicadas a la educación inmobiliaria y posee una educación universitaria gerencial sólida y privilegiada como egresado de la Escuela de Negocios de la Universidad de Miami.
En entrevista con la Revista Construcción, Rivera reveló que la experiencia que más disfruta es la de “motivar a profesionales inmobiliarios de Latinoamérica a que lleven una oportunidad de trabajo más profesional, más recta y basada en una cultura de valores. Hay que difundir el mensaje de que vender una casa o apartamento conlleva muchas implicaciones mo- rales y profesionales”. Esto lo hace desde el 1988 cuando comenzó a redactar artículos para El Nuevo Día y otros periódicos locales, Panamá América, Capital Financiera y otras revistas centroamericanas.
“Mi faceta como escritor es muy importante para mi. Comencé a publicar libros en el 2009 y en estos momentos estoy escribiendo libros para motivar e invitar a consumidores a reflexionar cuando les toque tomar una decisión inmobiliaria. En los próximos 18 meses vamos a crear una biblioteca inmobiliaria para todo el mercado hispano en Estados Unidos la cual va a estar disponible en Internet”, adelantó el también reconocido como orador internacional de la National Association of Realtors.
Según Rivera, “la falta de profesionalismo que existe en América Latina” lo ha llevado a realizar este tipo de publicaciones. “La escasez de medios de educación, de superación y motivación que lamentablemente existe en muchos países de esta región me mueve a desarrollar material escrito”, agregó mientras contaba sus planes a corto plazo de seguir atendiendo a sus clientes privados e impartir conocimiento especialmente en los Estados Unidos y Puerto Rico.
Por varias ocasiones fungió como gerente de proyecto interino del Conglomerado de la Industria de la Construcción y oficial de relaciones públicas y coordinador del Clásico Internacional del Caribe. Cabe destacar que ha dedicado parte de su carrera profesional a la coordinación de eventos educativos, algunos de ellos con el endoso y apoyo de las principales agencias de gobierno de Puerto Rico.
Por otra parte, Rivera Pizarro demandó que su preocupación mayor en la industria es “la falta de recursos financieros y la lamentable emigración que tenemos de puertorriqueños. Cada año se vacían de 10,000 a 15,000 unidades en Puerto Rico. Tenemos la tasa de desocupación más alta comparada con muchos países”.
Actualmente, el corredor de bienes raíces mantiene la firma Dr. Properties Real Estate Puerto Rico, dedicada a la venta de propiedades y la plataforma educativa www.sabadosinmobiliarios.net.
Como meta a corto plazo, Alfredo Rivera Pizarro espera seguir desarrollándose como escritor y continuar aportando conocimiento a la industria, a su firma y a todos los latinos.
"Me disfruto motivar a profesionales inmobiliarios de Latinoamérica a que lleven una oportunidad de trabajo más profesional, más recta y basada en una cultura de valores".