Acusado un policía de pornografía infantil
Los federales lo procesan mientras la Policía lo investiga por actos lascivos
UN POLICÍA con 33 años de servicio y que en los últimos años había estado trabajando con niños en la Liga Atlética Policiaca (LAP), fue arrestado por agentes federales que le sometieron dos cargos de pornografía infantil, informó la Fiscalía federal.
El policía William Berríos Cruz, de 55 años, también está bajo investigación por la propia Policía por una querella de actos lascivos contra una menor, “que podría estar relacionada” con los hechos del caso federal, dijo por su parte, el director de la región policial de Aibonito, el teniente coronel Noel Torres.
Berríos Cruz, al cierre de esta edición, enfrentaba su vista inicial ante la magistrada federal Silvia Carreño y se daba por descontado que la fiscalía solicitaría que se le dejara preso sin fianza, por representar un peligro a la comunidad, sujeto a una vista de fianza a celebrarse en una fecha futura.
ALLANAMIENTO INMEDIATO
El agente fue arrestado anoche en su residencia en Barranquitas por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) que habían allanado su casa en la noche del viernes pasado, informó la fiscalía.
La investigación comenzó el mismo viernes pasado cuando una menor de edad se querelló de que el agente “la había agredido sexualmente después de echarle algo en un trago”, informó la Fiscalía federal.
A base de la información recibida, los agentes de ICE condujeron el allanamiento en la casa de Berríos en Barranquitas y ocuparon teléfonos celulares de los cuales pudieron recuperar videos de “al menos una menor, de 16 años, (Jane Doe #1) en conducta sexual explícita con Berríos Cruz”.
“INTENTÓ BORRAR VIDEOS”
Los videos comprometedores habían sido borrados pero ICE los pudo recuperar mediante un examen forense de los artefactos, informó la fiscal Rosa Emilia Rodríguez.
Los cargos presentados por el fiscal federal Marshall D. Morgan conllevan penas mínimas de 15 años de cárcel y máximas de hasta 30 años, en cada uno, en caso de que el imputado sea hallado culpable.
Desde 2009 Berríos Cruz tenía título de “oficial juvenil” y estaba asignado a la LAP de la región policial de Aibonito, donde trabajaba con niños y adolescentes de las comunidades en iniciativas cívicas y deportivas.
No obstante, algún tipo de conducta no especificada ayer llamó la atención de sus supervisores y desde hace un año y cuatro meses fue removido de las actividades de la LAP y estaba asignado a hacer tareas de mantenimiento de equipo en el cuartel de Barranquitas, dijo el teniente coronel Torres.
El oficial dijo que Berríos Cruz había sido separado de la LAP porque el director regional de dicha unidad, sargento Ramón Quiñones, “había visto algo”.
Torres no quiso abundar sobre lo que había visto el supervisor de la LAP pero respondió en la afirmativa cuando se le preguntó si era conducta sospechosa con menores en el programa.
Torres dijo que ya comenzó el proceso administrativo para suspender sumariamente y separar a Berríos Cruz de la Policía. “'Son cargos muy serios, hay que separarlo de inmediato” dijo.
“Estamos investigando una querella de actos lascivos que presentaron contra él el viernes que podría guardar relación con el caso federal”, dijo el alto oficial policiaco.
La pesquisa sobre actos lascivos a una menor es compatible con los hechos denunciados por la adolescente que es víctima en el caso federal. Los delitos sexuales, como agresión sexual y actos lascivos, son de jurisdicción estatal, mientras que la pornografía infantil puede ser procesada a la vez en el foro federal y en los tribunales de Puerto Rico, como ocurre en el caso del ex comisionado de seguridad de San Juan, Hilton Cordero.
Torres dijo que no se descarta que el Negociado de Investigaciones Especiales (NIE) del Departamento de Justicia pueda entrar en la pesquisa criminal estatal pero hasta el momento la Policía tiene la investigación.
Por su parte, el superintendente de la Policía, Emilio Diaz Colon, dijo en una declaración escrita que “el pueblo puede estar seguro de que cualquier miembro de la Policía que cometa delitos o actos que violen los reglamentos de la Uniformada serán procesados tanto criminal como administrativamente”.