El mérito y el mito
El fracaso de la coalición Va por México y su alianza con intelectuales, medios de comunicación, elites nacionales y extranjeras, para impedir que la izquierda se hiciera de nuevo con la mayoría absoluta en el Congreso, la prefiguró la intensificación de la campaña nacional contra el presidente López Obrador y Morena en vísperas de las elecciones intermedias.
El escenario lo anticipó El País (Espacio 4 - 667) y un estudio de Citibanamex donde advierte: “A nivel nacional, Morena sigue siendo la oferta política individual más fuerte. Incluso juntos, la coalición del PAN-PRI-PRD no parece lo suficientemente competitiva para superar a Morena y sus aliados en el control mayoritario de la Cámara de Diputados” (Forbes, 25.02.21).
El estudio demoscópico de Varela y Asociados, levantado entre el 29 de abril y el 5 de mayo, base para la proyección de Forbes, le asignó a Morena 46% de la intención efectiva de voto, y a sus aliados PVEM y PT, 5% y 3%. El PAN, PRI y PRD (Va por México) recibieron 17%, 15% y 5% de la preferencia efectiva. Ya en las urnas, la votación por el partido guinda disminuyó 10 puntos. Morena, los verdes y los petistas tienen 332 diputados en la actual Legislatura (mayoría calificada). En la siguiente, alcanzarán un máximo de 280 (mayoría absoluta). El PAN, PRI y PRD subirán de 168 a 220. Poner freno al Presidente es mérito de la ciudadanía, no de los partidos.
Con esa mayoría y la que también tiene en el Senado, Morena continuará la agenda de la 4T, mas no con la facilidad de ahora, pues aún con los diputados del PT y el Verde, no podrá aprobar reformas constitucionales. Para hacerlo necesitará, al menos, 51 votos de otras fuerzas políticas. Si legisladores de oposición perciben que Morena permanecerá seis años más en la presidencia, no dudarán en engrosar su bancada como ocurrió en el actual Congreso.
Va por México anunció una coalición legislativa días antes de las elecciones, con la intención de atraer el voto. Sus líderes ofrecen que el Congreso dejará de ser la oficialía de partes de la Presidencia para convertirse en un contrapeso real –jamás lo ha sido, aun en las alternancias–. La idea no es nueva, pero sí contradictoria: recién iniciada la gestión de Peña Nieto, el PRI, PAN y PRD, firmaron el Pacto por México para negociar –fuera de la Cámara de Diputados– pero con su aval, un paquete de reformas constitucionales a cambio de concesiones y dinero, según declaraciones judiciales del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya.
Los éxitos del tándem Peña Nieto-Luis Videgaray (Hacienda) llevaron al Presidente a la portada de Time (24.02.14, edición para América Latina). Bajo el titular, Saving Mexico (Salvando a México), la revista destaca “cómo las radicales reformas han cambiado la narrativa de un país manchado por el narco”. Las transnacionales se frotaron las manos y hoy cabildean para echar abajo la contrarreforma aprobada por el Congreso a iniciativa del presidente López Obrador, el “Falso Mesías” según The Economist.
El 22 de enero de 2015, el semanario británico desinfló el triunfalismo con el artículo titulado, El Pantano Mexicano. El Presidente no entiende que no entiende, mostró otra cara. La
Administración de Peña Nieto –advierte– “está tocada” por los escándalos de corrupción.
“El principal beneficiario del cinismo que está engendrando el presidente puede ser Andrés Manuel López Obrador (…) un populista mesiánico que ha estado dos veces a punto de ganar la presidencia”.
La joya de las reformas, la energética, emergió del mismo pantano. Según Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, Peña Nieto y Videgaray le ordenaron sobornar con 120 millones de pesos a diputados y senadores de oposición para aprobar las reformas estructurales; en particular, la referida a Pemex y la CFE.
El Congreso dista todavía de ser un poder independiente. A veces más, a veces menos, pero siempre ha bailado al son que le tocan el Presidente y los gobernadores. Ayer fueron Fox, Calderón y Peña. Hoy es AMLO. Mientras los diputados y senadores respondan al interés de sus partidos y sus camarillas, y no al de los ciudadanos, la separación de poderes será un mito.