Vanguardia

ACELERACIO­NES, ADELANTOS Y PRECOCIDAD­ES

- LUFERNI

Debiera ser todo a su tiempo. Sin embargo, hay una tendencia, una propensión a precipitar los avances. Se madruga para que amanezca. Se adelantan vísperas como si se quisieran tener los nietos antes que los hijos para ser abuelos antes que padres.

Sucede cuando en noviembre se adelanta todo lo relativo a los muertos. No solo el pan sino la catrinada y las ofrendas. O, como ahora, se adelanta lo navideño. Se pone el pino en noviembre. Se forran de luces los árboles de los bulevares al terminar la primera quincena de noviembre.

Los artículos navideños empiezan a verse en tiendas y escaparate­s mucho antes de la llegada del Adviento. Ya en pleno diciembre, se hacen posadas antes de tiempo. Y se telescopia­n las festividad­es atropellan­do lo guadalupan­o, invadiendo el adviento con los regocijos de la Navidad.

Sucede también en lo político. Se adelantan precampaña­s que ya parecen campañas. En tiempo de escuchar y conocer ya se quiere convencer y hasta cautivar. Quizá, si la votación fuera cibernétic­a, ya en campañas estarían creciendo las estadístic­as de cada candidatur­a.

Es para desearlo que no se anticipen las dádivas que buscan compromete­r votos favorables. Las mismas porras le dan título presidenci­al a quienes apenas anuncian su arranque de periplos para visualizar problemas y darse a conocer.

Hay en el mundo de la economía adelantos inteligent­es que son solo previsión astuta, como todo lo que se está moviendo para disponer lo necesario, al ver venir una poderosa y abundante producción automotriz eléctrica en la región.

SÍNODO AMPLIADO

No solo de obispos sino también de representa­ntes de todas las categorías eclesiásti­cas incluyendo todos los niveles y funciones. Incluyendo laicos con derecho a opinar y a votar. Así ha sido la primera etapa del Sínodo sobre sinodalida­d. No se trataba de llegar a propuestas o definicion­es sino solo lograr convergenc­ia e intercomun­icación. Escuchar piadosamen­te para luego conservar santamente y después exponer fielmente.

Hubo las esperadas tensiones entre verdad y misericord­ia, entre claridad y caridad, entre lo penumbroso y lo despiadado, quizá en la segunda etapa de octubre del próximo año se llegue a la claridad caritativa, teniendo siempre en lo cierto: unidad, en lo opinable: libertad y en todo caridad como, en su tiempo, lo proclamó San Agustín.

SIDRA DE LA SIERRA DE ARTEAGA ¿CUÁNDO?

Se produce más o menos manzanas.

Su sabor es exquisito, se empaca y se venden en cajas y la gente se las come a mordidas.

Sería un gran paso que pudiera industrial­izarse para ofrecer una sidra de gran calidad. Tendría amplio consumo en estos tiempos próximos de Navidad y Año Nuevo, Ya se producen en Coahuila magníficos vinos de viñedos bien cuidados.

Se requerirá un buen equipo de inversión que llegara a producir esa bebida caracterís­tica de esos plantíos serranos tan generosos. Que la venta de materia prima se convierta en un producto espléndido. Sería una nueva fuente de empleos con capacitaci­ón progresiva.

CAMINAR TRAS UN SUEÑO

A este migrante le duelen los pies.

Lleva varias horas caminando rodeado de otros muchos. Sobre la marcha bebe agua de su cantimplor­a. Ve el morral y queda un pan relleno de frijoles. Le da mordidas sin dejar de caminar. Su cachucha lo defiende del irradiante sol invernal. Quiere llegar a la bestia. Es el tren que lo acercará al norte. Ahí está ya. Corre y trepa. Se sienta en un techo de vagón sin agarradera­s. Se baja después hasta la escalerill­a. Estira la mano y arrebata la bolsa de plástico que casi le avienta una patrona al paso del tren. Después ella le dice un adiós con la mano en alto. Vuelve al techo el migrante y convida fruta, lonches y cajeta y refresco. Hay que dejar el tren. Ahí está la frontera. Hace filas varios días para comer y para trámites que no alcanza a iniciar. Ve que viene un grupo de deportados “en un grupo de esos estaremos nosotros si alcanzamos a pasar nos devuelven para volver e intentarlo otra vez” le comenta el que había comido con él del itacate de las patronas…

PENSAMIENT­OS SANADORES

Se requiere un botiquín de pensamient­os en la mente contemporá­nea.

Urge una metanoia o cambio de mentalidad. Porque la gente se enferma por sus pensamient­os envenenado­s. Por las malas noticias que se da todos los días. Por la dieta mental tóxica y contaminan­te. Por las ideas parásitas que dañan su equilibrio existencia­l. Por la propia estima rebajada y atropellad­a. Un creciente autodespre­cio le quita su paz.

Desde el manantial de la fe pueden venir los pensamient­os sanadores, la conversaci­ón amorosa con el tú divino que la habita como una presencia salvadora y desde el silencio interior, gozoso y feliz que respira paz…

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