Coordinadores, “vigilantes” federales
LOS GOBERNADORES SON Y SERÁN AUTÓNOMOS EN SU GESTIÓN
La figura de coordinadores de los programas sociales tienen una finalidad específica: se trata de evitar que funcionarios desvíen recursos federales. Por supuesto, los gobernadores del PRI, PAN y PRD, están es desacuerdo por una sencilla razón: no podrán “meterle mano” a los miles de millones de pesos. Los gobernadores son y serán autónomos en su gestión, el presupuesto estatal es de su exclusivo dominio, la soberanía de estados NO se vulnera. Ocurre que los grupos o facciones políticas derrotadas el pasado primero de julio, ven perdida la posibilidad de hacerse ricos en tres o seis años y saben también, que al no estar en condiciones de hacer uso clientelar de los dineros y programas, la posibilidad de recuperar el poder se extingue. Al PRI y al PAN, la República y la soberanía de los estados nunca les ha importado, son hipócritas en su mayoría, lo suyo eran los “moches”, el desvío y manipulación de los recursos federales y obvio, cómo “cree el león que todos son de su condición”, ahora rezuman su coraje de manera grotesca, no les importa el ridículo hecho frente al mundo.
HASTA EL 20
Hace 2 semanas Arturo Núñez declaraba su compromiso de que la administración cumplirá todas las obligaciones con sus trabajadores, así como con el pago de servicios personales antes del término de su mandato en diciembre próximo. “Estamos en pláticas con el titular de la SHCP, José Antonio González Anaya y con Carlos Urzúa Macías, secretario del ramo en el próximo gobierno, para ampliar el presupuesto”. Faltan 16 días para que se cumpla el plazo límite de pago de las prestaciones decembrinas.
AMLO
A cada propuesta de AMLO respecto a programas de beneficio social, la trillada pregunta de sus detractores es, ¿de dónde obtendrá los recursos para ello? La respuesta ha sido repetida hasta el hartazgo: del combate a la corrupción que en México, de acuerdo a cifras del Banco Mundial y otros organismos internacionales, representó 672 mmdp con Felipe Calderón y llegó al descaro de 2.1 billones de pesos con Enrique Peña.