La Hamaca y el Rebozo
De la mano de artesanos mexicanos, Debie Davison creó un concepto con productos que fomentan el vínculo afectivo entre padres e hijos, como el porteo con rebozo, una costumbre con grandes beneficios para un acercamiento más humano.
Cargar a los hijos en un rebozo es una costumbre primitiva con grandes beneficios que La Hamaca y el Rebozo retomó para proponer, en esta cultura industrializada, un acercamiento más humano entre madre e hijo.
Para Debie Davison, una de las fundadoras de la tienda, la experiencia propia de la maternidad fue su principal motor para crear este concepto con beneficios que permiten una crianza con conciencia, pues toma en cuenta las necesidades de un recién nacido, crea vínculos afectivos y otorga la seguridad y confianza básica que necesita el bebé en su primer año de vida.
De la mano de artesanos de Chiapas, Oaxaca y Michoacán, Debie, diseñadora de modas con especialidad en telas y colores, formó el equipo perfecto para crear estas piezas únicas con identidad mexicana. Sumado a las necesidades de madre-hijo, cuentan con otros productos como cunas moisés, cobijas, artículos decorativos, ropa, juguetes y más, todo con el toque mexicano que caracteriza a la marca.
Después de nueve meses de estar dentro del vientre materno, el sistema neuronal del bebé al nacer no está muy bien desarrollado y el apego a la mamá le ayuda a disminuir el estrés y el miedo de no saber qué está pasando. Además de dar seguridad, disminuir el reflujo y ayudar en la posición de la cadera, escucha el corazón de mamá. Qué mayor regalo se le puede dar a un hijo que tenerlo cerca del pecho.
A la madre le ayuda a evitar la depresión postparto, se enamora más rápido de su bebé y, sobre todo, tiene manos libres.
“LOS BEBÉS NO SE ACOSTUMBRAN NECESITAN” A LOS BRAZOS, LOS —Debie Davison, creadora de La Hamaca y el Rebozo