Liga MX: catastrófica decisión
Pues, ya está, nos quedamos sin futbol. Y los equipos, sin los ingresos de los anunciantes en las trasmisiones televisivas y sin lo que entraba en las taquillas de los estadios cada fin de semana. En cuanto a los vendedores de cerveza en el graderío, pues no ganarán ni un peso, como tampoco los encargados de la seguridad o los que se embolsaban propinitas por esto o por lo otro en una economía, como la nuestra, donde hay gente que se dedica a introducir el boleto del estacionamiento en la ranura del cajero automático o a hacerte señas detrás del coche cuando estás maniobrando.
Pérdida total, o sea, aunque desde las alturas del poder nos quieran reconfortar diciéndonos que las pandemias no nos harán nada a los mexicanos. Somos resistentes, es cierto, y así nos hemos hecho porque cada que toca nos caen encima crisis, una tras otra, al punto de que muchos jóvenes no han conocido otra realidad que ésa, la de que tenemos que apretarnos el cinturón (y todo ocurre, encima, sin que sepamos bien a bien cuál es nuestro pecado original aunque, miren ustedes, a lo mejor nada más estamos pagandoel precio de ser como somos).
En fin, más allá de nuestra evidente resistencia –llamémoslo también estoicismo o, más crudamente, simple conformismo— y de estas generalidades sobre nuestra
La salud es un elemento primordial en la plantilla de cualquier club
posible identidad, yo me pregunto si la cancelación pura y simple de la Liga MX era la única decisión posible y si la celebración de partidos a puerta cerrada, así fuere para proseguir meramente con la competición y para no dejar en el abandono a los seguidores, no era una opción razonable y, sobre todo, menos catastrófica en lo que se refiere a los quebrantos económicos.
Después de todo, un equipo de futbol es un grupo muy pequeño de individuos estrechamente supervisados en todo momento, con un médico de planta y entrenadores deportivos dedicados exclusivamente a potenciar las capacidades físicas de los jugadores. Dicho de otra manera, la salud es un elemento primordial en la plantilla de cualquier club, a diferencia, pongamos, de una asociación de aficionados a la cerveza artesanal o al disfrute de puros habanos.
No nos queda muy claro dónde estaba el riesgo de que siguiera la Liga MX sin público. Pero, bueno…