DIFERENTES
VAQUEROS Y ACEREROS PIERDEN, PERO SU DESTINO ES DISTINTO, DALLAS AÚN PUEDE CALIFICAR A PLAYOFFS MIENTRAS PITTSBURGH ESTÁ ELIMINADO
Yen Dallas siguen vivos y los playoffs están en su poder, a pesar de perder. Luego de tres triunfos al hilo y de estar empatados con dos rivales de división, los Vaqueros simplemente no pudieron dar el golpe que necesitaban y mostraron que a la hora cero no parecen tener el calibre de contendiente. Aunque al fi nal del juego y con otros resultados, en sus manos está el llegar a playoffs.
Tras haber estado abajo 31-17, regresaron y empataron con 21 segundos por jugar, forzando al tiempo extra, pero ahí, su esperanza se acabó pronto. Garrett Hartley convirtió un gol de campo de 20 yardas en tiempo suplementario y los Santos de Nueva Orleans le pegaron a Dallas al derrotarlos por 34-31.
Drew Brees tiró para 446 yardas y tres touchdowns, y condujo una serie para la patada ganadora.
Los Santos amarraron el resultado cuando un balón suelto de Marques Colston rodó hacia adelante unas 20 yardas hasta la yarda 2 de Dallas, donde fue recuperado por el ala cerrado Jimmy Graham.
“No vamos a dejar que nos digan que ya no jugamos por nada”, explicó Brees. “Queríamos preocuparnos por las cosas que están dentro de nuestro control”.
Los Vaqueros cayeron pese a un intento fi nal de remontada con dos touchdowns en los últimos 3: 35 del partido. Tony Romo, quien lanzó para 416 yardas y cuatro anotaciones, conectó con Miles Austin para el touchdown del empate con 15 segundos por jugar en el reglamentario.
Las esperanzas de playoffs de los Santos (7-8) acabaron con la victoria de los Vikingos de Minnesota ante los Texanos de Houston, mientras los Vaqueros (8-7) sonrieron al ver que Gigantes perdió en Baltimore, y con eso, el destino está en sus manos: si vencen la próxima semana a Washington (quien es líder en este momento) podrían quedar como campeones de su pelotón, ya que el pase como comodín no es posible.
En este encuentro el ala cerrado Jason Witten tuvo seis recepciones para llegar a 103 en la temporada, la mayor cantidad para un jugador de su posición en una campaña.
Se van a casa a descansar. Tras mostrar inoperancia en los últimos juegos, los Acereros de Pittsburgh ya pueden hacer reservaciones para sus vacaciones que comenzarán antes de lo que tenían planeado, pero ellos mismos tienen la culpa. Tras perder dos juegos al hilo, llegaron al domingo clave, el domingo de un juego de vida o muerte... y lo dejaron ir, al igual que su deseo de calificar a playoffs, un boleto que se quedaron los Bengalíes.
Josh Brown pateó un gol de campo de 43 yardas con cuatro segundos por jugar para llevar a Cincinnati a un triunfo en Pittsburgh por marcador de 13-10, llevando a los Bengalíes a la postemporada por segunda campaña consecutiva.
Brown falló un intento de 56 yardas momentos antes, pero tuvo una segunda oportunidad cuando Reggie Nelson interceptó a Ben Roethlisberger y lo regresó a la yarda 46 de Pittsburgh con 14 segundos por jugar. Andy Dalton encontró a A.J. Green para 21 yardas en la siguiente jugada, perfilando el triunfo de los Bengalíes.
Dalton completó 24 de 41 pases para 278 yardas y dos intercepciones para los Bengals (9-6), que rompieron una racha de cinco derrotas contra Pittsburgh (7-8). Roethlisberger completó 14 de 28 pases para 220 yardas con una anotación y dos entregas, incluyendo un error costoso en los últimos segundos que terminó con las esperanzas de postemporada en Pittsburgh.
Los Acereros necesitaban ganar y lo sabían, pero nunca pudieron manejar esta presión contra una defensiva que fue una pesadilla toda la tarde y que Ben Roethlis- berger soñará por muchos días. Los Bengalíes capturaron cuatro veces al QB y le permitió a su rival que solo completaran dos de 14 conversiones de tercera oportunidad.
Los boletos para el encuentro en el Heinz Field bien podrían haber tenido la leyenda: “Ticket para
playoffs o para irse de vacaciones”. Eso era lo que estaba en juego en el emparrillado luego de que los Steelers entraron en una mala racha donde tras estar con marca de 6-3 en la Semana 10, cayeron a un 7-7 al ganar sólo uno de sus últimos cinco duelos, y eso los puso en esa situación crítica que los aniquiló por tener frente a ellos a unos Bengalíes que mostraron estar a la altura.
Cincinnati demostró que merecía ese pase a la postemporada más que su rival de ayer. Los Bengalíes regresan a playoffs gracias a que suman seis triunfos en siete duelos, y llegarán a esta instancia como equipo comodín. Esta es la primera ocasión desde 1981-1982 que Cincinnati liga dos calificaciones a la postemporada, y todavía tienen un juego de alto calibre en la Semana 17, cuando reciban a Baltimore.