Ex convento de Huaquechula requiere terapia intensiva
“Colapsaron sus bóvedas y se cayó parte de la cúpula porque el remate de la torre se vino abajo”, señala el perito Francisco Pérez de Salazar
Anda solo en su camioneta, con su catálogo de monumentos que resultaron dañados con el sismo de 1999. Como hace 18 años, vuelve a recorrer los inmuebles históricos, civiles y religiosos que sufrieron daños, pero ahora por el reciente sismo del 19 de septiembre. Francisco Pérez de Salazar llega al ex convento franciscano de San Martín Huaquechula. Su mirada lo dice todo: el inmueble debe ser sometido a “terapia intensiva”.
MILENO visitó el ex convento de Huaquechula, considerado de los más representativos del siglo XVI, en Puebla, debido a que se vio enormemente afectado con el sismo. Este monumento reguarda entre sus tesoros las primeras pinturas de Cristóbal de Villalpando.
El inmueble, que tenía un tiro gótico, perdió parte de su bóveda, por lo que debe ser sometido a una profunda restauración, explica a MILENIO Pérez de Salazar, doctor en arquitectura y perito valuador consultado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). “En el ex convento de Huaquechula se colapsaron sus bóvedas, se cayó parte de la cúpula porque el remate de la torre se vino abajo sobre la bóveda del coro. Ahí se hizo un caos porque se cortó hacia la nave principal, por lo que el inmueble está colapsado en un alto porcentaje”.
El ex convento de Huaquechula, con uno de los primeros cinco retablos del siglo XVI, sufrió severos daños, pero se puede recuperar. Para ello se necesitarán alrededor de 10 millones de pesos. “Es muy difícil de determinar cuánto se necesita. En este caso se trata de muchos millones de pesos, pueden ser ocho o diez, porque primero hay que limpiar el edificio, luego restaurar y rehacer las bóvedas. Va a costar mucho dinero”. Justamente el día del sismo, el ex convento era objeto de labores de mantenimiento. Los trabajadores que realizaban estos trabajos se salvaron de milagro porque salieron a comer, relata Silverio Reyes Sarmiento, secretario del Comité Eclesiástico del ex convento de Huaquechula. “Antes el sismo estaban haciendo intervenciones en los muros colaterales. Por fortuna, el sismo sucedió en un momento en que cerraron las puertas para salir a consumir sus alimentos. Creo que si tardaba 15 minutos más, la gente que estab a ahí en restauración hubiera fallecido”.
Históricamente, subraya Reyes Sarmiento, el monumento es uno de los ex conventos franciscanos más importantes del país, que inició su construcción en 1531 y se fundó en 1562. “El personaje que lo funda es Fray Juan Alameda, el mismo que hizo el de Huejotzingo y el de Tula, Hidalgo. Lo más importante es que, dicen los relatos, escogió su mejor convento para ser enterrado, y sus restos están aquí”.
El Fondo Nacional de Desastres (Fonden) será el que brindará la mayor aportación económica para la restauración de los monumentos arquitectónicos, como este inmueble, señala Víctor Hugo Valencia, director general de la delegación del INAH en Puebla.
Para contar con los recursos para la restauración del patrimonio arquitectónico, histórico, artístico y arqueológico, se debe solicitar el apoyo del Fonden. “Nosotros vamos a solicitar recursos para sustentar los daños. Primero tenemos que mandar una solicitud de recursos preliminares. La segunda etapa es la reconstrucción de los muebles, para ello gestionaremos recursos aplicando también el seguro que el instituto tiene contratado para todo el patrimonio para atender las necesidades de restauración a corto, mediano y largo plazo”, concluye Valencia.
Por el momento, el ex convento de San Martín Huaquechula está cerrado al público. Nadie puede entrar hasta que el INAH y los peritos lo determinen.