LAS REBANADAS DEL PASTEL
63 millones de mexicanos en pobreza, y contando. La Cepal va más allá: en 2015 el gobierno mexicano administraba el 23 por ciento de los activos; las empresas privadas, 19 por ciento; empresas públicas autónomas, 9 por ciento; instituciones financieras, 5 por ciento. Al mismo tiempo, 7 por ciento de los activos financieros estaban en posesión de extranjeros. No obstante, las familias concentraban la mayor proporción: 37 por ciento, equivalente a 28 billones de pesos mexicanos. “Lamentablemente, la repartición de estos 28 billones de pesos es muy desigual”. Dos terceras partes de estos activos físicos y financieros están en manos del 10 por ciento de las familias del país, en tanto que el uno por ciento de ellas más de un tercio. Por ello, el coeficiente de Gini de la distribución de los activos totales (físicos y financieros) de las familias es de 0.79. La repartición de los activos financieros es aún más desigual: el 80 por ciento es propiedad del 10 por ciento más rico. “La estructura de la propiedad es una de las variables fundamentales en el mantenimiento, si no en el crecimiento, de la desigualdad social. Por ello, los estudios empíricos sobre la medición de la riqueza o la desigualdad de activos tienden a coincidir en que esta es una desigualdad mayor, más profunda y más estable que la que arroja la medición sólo del ingreso”, subraya la Cepal. Esa es la crudísima realidad documentada por el organismo especializado de la ONU, pero en otras latitudes, las del gobierno mexicano, florecen las industrias de la mantequilla y del maquillaje institucional: todo le resbala, porque –asegura el ahora cronista deportivo José Antonio Meade (secretario Pero, ¡serenos!, que no todo está perdido. Ya lo dijo el presidente del BBVA (dueño de Bancomer), Francisco González: “es admirable la resistencia de la economía mexicana a los desafíos que ha enfrentado”. ¡Ole!, pero cómo no lanzar el piropo y las serpentinas, si 40 por ciento de las utilidades netas mundiales de ese grupo financiero las obtiene en México y de su clientela en el país.