OPORTUNIDAD EN LA RENTA FIJA
Si bien un incremento en las tasas de interés supone mayores ganancias para los inversionistas, en el mercado de deuda la relación no es tan simple ni tan directa para todos los plazos. Banco de México ha incrementado su tasa de referencia en 4% desde diciembre de 2015, con el fin de mantener a raya la inflación. El último aumento fue en junio, cuando la tasa llegó a 7%. Los analistas prevén que el ciclo de alzas terminará pronto. Algunos pronostican que 2017 cerrará con la tasa en 7.25% y que, en 2018, Banxico la bajará. “No hay muchas más ganancias que esperar”, dice Esteban Polidura, director de Inversiones de UBS. Con base en esa expectativa en el futuro de las tasas, hay oportunidades específicas para quienes invierten en bonos gubernamentales o piensan hacerlo. “Nosotros vemos una oportunidad más evidente en las duraciones de mediano plazo, para bonos que vencen entre cinco y 10 años. Nos gustan más las valuaciones en esa parte de la curva”, dice el experto. Al graficar en una curva de rendimientos los niveles de las tasas de interés para distintos plazos de vencimiento, los de mediano plazo resultan más atractivos por su valuación. “Los bonos que están en la parte media deberían tener un rendimiento menor que el que tienen hoy en día y el precio debería ser más alto”, explica. Sin embargo, el precio es menor. El rendimiento esperado está en función de dos factores, la tasa a la que salió el bono y el ‘valor nocional’ del bono, cuánto pagarán por ese bono al término del plazo, que, en este caso, es mayor que el valor al que cotiza. El mercado no refleja los valores fijados, pues se ha enfocado en demandar bonos de largo y corto plazos. También demuestra que el mercado tiene la expectativa de que Banxico termine pronto su política de alza de tasas.