¡Qué deleite!
La NBA tendrá su epicentro de la temporada 2017-18 en el Staples Center de la ciudad de Los Ángeles.
A partir de hoy, los mejores basquetbolistas del mundo harán acto de presencia en la casa de los Lakers para celebrar el Fin de Semana de estrellas en la NBA, que culminará el domingo con la edición 67 del “All-Stars Game”.
El tradicional Juego de Estrellas ha sufrido modificaciones para esta edición. La liga decidió dejar atrás los duelos de la Conferencia Este contra el Oeste y formó dos conjuntos capitaneados por los dos jugadores que más votos recibieron por los aficionados.
LeBron James y Stephen Curry fueron los elegidos y cada uno armó su roster con el que intentarán llevarse la primera edición en esta modalidad. El juego luce más que interesante. El equipo de LeBron cuenta con siete jugadores del Este y cinco del Oeste, mientras que el de Curry tendrá a siete jugadores del Oeste y cinco del Este.
Aunque hay algunas bajas confirmadas por lesión, la única de relevancia entre los titulares es la del estelar centro de los Pelicans DeMarcus
Cousins, quien será reemplazado por Paul George del Thunder de Oklahoma. Y quizás la gran ausencia será la del veteranísimo alero argentino Manu Ginóbili, dado que no recibió los suficientes votos para formar parte de los cinco representantes del Oeste.
Además del All-Stars, el Fin de Semana de estrellas cuenta con otras actividades que mantienen al filo de la butaca a los cientos de espectadores que vibran con el ‘deporte ráfaga’. El concurso de clavadas, de triples, de habilidades y el partido entre novatos contra extranjeros, hace del evento el más espectacular de los deportes americanos.
Si bien es una realidad que la NFL, la MLB y la propia MLS también cuenta con sus eventos que reúnen a sus mejores deportistas, ninguna ha alcanzado el grado de espectacularidad que la NBA, ahora falta ver si los cambios que implementaron los organizadores para esta edición tienen un resultado positivo tanto en el espectáculo como entre los aficionados.