Ataque de perros a patos divide a vecinos de Toluca
Protectores de animales piden no satanizar a los canes; les buscan hogar
Toluca, Méx.— El estanque que forma parte del paisaje en la Alameda de Toluca desde hace décadas alberga a más de 30 patos que son alimentados y cuidados por el gobierno municipal, así como por la ciudadanía que frecuentemente acude a este jardín.
Sin embargo, el viernes amanecieron siete perros dentro de las casas de madera asignadas a las aves; mataron a 16 patos.
Alrededor de las 06:30 de la mañana, elementos de la policía municipal recibieron un llamado de la ciudadanía sobre la presencia de canes de talla mediana, la mayoría de edades entre los siete y nueve años, al interior del estanque, que para entonces tenía un tapiz de plumas de pato en el agua verdosa contenida en este lugar.
En este lugar comenzaron a juntarse vecinos de la colonia Merced-Alameda, quienes acostumbran asistir a clases de zumba impartidas en el teatro al aire libre, los que pasean a sus perros por el lugar, además de personal del ISSEMyM que acude a las oficinas ubicadas en las calles aledañas, trabajadores de la construcción de un conjunto departamental, locatarios de la zona y alumnos de escuelas cercanas.
Las opiniones sobre el destino de los canes se dividieron, pues personal de Protección Civil se alistaba para retirarlos con apoyo de trabajadores del Centro de Control Animal. Los animales serían puestos en observación durante 10 días para determinar su estado de salud físico y mental, y con ello definir cuántos pueden ser dados en adopción o son peligrosos para convivir con humanos.
El director del Centro, Ignacio Medina Ferrusca, apoyó en las labores de retiro de los canes, quienes fueron dormidos y amarrados para poderlos sacar del estanque, algunos de los cuales se tornaron agresivos al ser acorralados con lazos para amarrarlos.
El funcionario municipal informó que los mantendrán bajo resguardo en el centro ubicado en Tlacotepec, al sur de la ciudad, para analizar su conducta y también para descartar que se encuentren enfermos.
Pidió el “apoyo de la ciudadanía y de las autoridades correspondientes para poner en adopción a los perros que sean aptos para la convivencia con humanos”, aunque rechazó que puedan adelantar si son agresivos, peligrosos o si cazaron por hambre.
Al lugar llegó Pamela Almazán Franco, protectora de animales independiente, quien pidió quedarse con los canes, y solicitó que no fueran maltratados, incluso exigió firmar un protocolo de rescate, pues consideró que la jauría permanece en las calles por irresponsabilidad de las autoridades municipales, que no esterilizan a los perros callejeros porque “no hay quien los cuide, pero de esa forma permiten que se multipliquen y busquen la forma de subsistir”.
Pidió no satanizar la conducta de los canes que, aseguró, según su experiencia, no son animales agresivos, podrían ser adoptados y acostumbrarse a una vida de casa.
Los perros fueron llevados en una camioneta, dormidos con tranquilizantes; 14 patos fueron rescatados.