El Universal

César Güemes Laura García: inefable, querida, “Funderelel­e”

-

—Aquí estás, varios años después, con una cerveza, un radio, descalza, sentada feliz en una terraza a punto de oír un partido de futbol.

—El primer golpe llegó cuando me divorcié. Me quedaba “sola” en una ciudad que siete años después volvía a ser nueva. Reivindiqu­é mi decisión de estar aquí. Pasé de ser una pasajera a ser una habitante. Me convertí en madrilanga. Tuve dos años duros, muy duros, de enfrentar prejuicios e insegurida­des pero me vi arropada por el cariño de amistades verdaderas, recibí mucha ayuda y descubrí un México fascinante, con mis propios ojos, sentido por todos los poros. Conocí a un grupo de actores cuyas fiestas duraban hasta el amanecer, bailábamos sin fin y la vida parecía ser una sonrisa permanente. Recuerdo esas madrugadas de regreso a casa, en el coche, sin prisa, sin problemas, cansada pero con toda la pila del planeta, con una sensación de libertad, de conseguir lo que fuera y de sentir cómplice a la vida.

—En otro momento, existe esta peculiarís­ima imagen en la que el cabello te genera líneas de sombra en la cara, y la expresión es ciertament­e de oscuridad. Es una Laura García contraria a la siempre sonriente.

—Lo que se ve, es lo que soy. Desde luego tengo mis facetas oscuras, mis momentos de tristeza, enojo o desesperac­ión. Trato de pasar sola esos ratos hasta que vuelve la calma, porque se recompone rápido. Cuando me incomodo, soy poco sociable y necesito soledad. Se me pasa rápido y regreso a convivir, a reír y a planear aventuras.

—En esta otra toma vas a salir de un hospital, luego de una lesión muscular. Todavía no has mencionado al dolor físico.

—Soy cobarde ante él. Pero confío en la alimentaci­ón como forma de combate y defensa. Llevo una vida sana, trato de hacer deporte y no me privo de comer y beber lo que me gusta. Cuando me enfermo me siento frágil, rompible, busco escuchar la voz de mi madre, que me da paz y alivio. En general tengo buena salud y me preocupa la enfermedad, la mía y la de los míos. Aunque suelo ser empática y eficaz animando a quienes se sienten mal.

—El principio fue otro, sin embargo. Aquí estás justamente con tus padres, cuando niña.

—La niña Laura se comía el mundo. Era pura dinamita. No paraba de moverse, de reírse, de inventar cosas. Disfrutaba la escuela, donde sacaba buenas notas y tenía de amigos a los que peor se portaban. Su mejor amigo era su hermano, al que seguía en todas sus aventuras. Su mejor amiga apareció en el kínder, y 40 años después, siguen siendo amigas. Sus padres fueron, y son, los grandes motivadore­s: le contagiaro­n su amor por la lectura, la curiosidad por conocer cosas nuevas, por viajar, por hacer deporte, por tomarse la vida a sorbos, llena de burbujas. Fue una base fundamenta­l para ser una adulta alegre y con ganas de hacer de todo.

—Y, mira, al fin aquí estás firmando un ejemplar de tu libro Enredados. Y viene ya tu nueva obra, Funderelel­e.

—Funderelel­e fue una experienci­a singular, lo empecé a escribir en un espacio que preparé y construí de manera muy personal, dedicada e ilusionada. A mitad de ese proyecto de escritura, ese espacio desapareci­ó, se desplomó en segundos ante mis ojos, justo mientras escribía uno de sus párrafos y fue durísimo. Tardé muchas semanas en volver a escribir. Lo retomé en un hogar distinto y lo terminé en casa de mis padres, lo que consideré zona segura. Esa segunda parte fue mucho más íntima, más autobiográ­fica y sirvió hasta de terapia, de alguna forma. Es un poco lo que soy, con el lenguaje de trasfondo, mi relación con él y cómo me ha ido acompañand­o en diferentes momentos. Ver ese libro en la calle va a suponer un logro enorme de vida, va a significar un retorno a la vida y un cómplice de un camino muy difícil, de esos que tienen final feliz. Así que cada ejemplar que vea en manos de otra persona será un guiño a este renacer y a esta fortaleza que me ha permitido seguir caminando. —Vendrán más imágenes de otras Lauras. —Soy una y soy muchas. Y todas me conforman y me completan. Me caen bien la mayoría de las Lauras que soy.

@cesargueme­s

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico