Vanguardia para todos
Proenza Schouler lanza su primera línea de básicos a un precio accesible
Es muy probable que Proenza Schouler no tenga el mismo peso a nivel mundial que otras firmas de moda estadounidense. A pesar de ello, la dupla conformada por Jack McCollough y Lázaro Hernández ha sabido posicionarse durante poco más de una década como una de las opciones más confiables para encontrar prendas y accesorios de vanguardia. Este mes, la marca dio un paso muy calculado en su plan de expansión al presentar su primera línea accesible.
La firma, que tiene por nombre PSWL (Proenza Schouler White Label, por sus siglas en inglés) ofrece piezas básicas como sudaderas, jeans y camisetas pero a una fracción de precio que las propuestas de sus líneas ready-to-wear. “Siempre hemos querido ser una marca que cubra todas las necesidades de los clientes que aman nuestra marca y nos sentíamos incompletos sin explorar el mercado de los básicos”, dijo la dupla a la revista Vogue.
Para el lanzamiento de esta colección, que puede conseguirse en México a través de la e-boutique Farfetch, la firma reclutó a la actriz y diseñadora Chloë Sevigny, quien además de tener una presencia constante en las revistas de moda desde los años noventa, fue una de sus primeras clientas. En la campaña, realizada por Ricky Saiz, puede notarse una influencia sutil de sus colecciones de pasarela, las cuales han integrado prints geométricos, deshilachados y lazadas, entre otros. Asimismo, la firma tiene planes de expandirse en la división de accesorios, lo que proveerá de opciones más accesibles que su afamado bolso PS1, el cual puede superar los 35 mil pesos en México.
Desde su fundación, Proenza Schouler ha logrado mantener el aprecio de la crítica (Anna Wintour es una de sus principales fanáticas) pero sin descuidar el aspecto comercial, a través de colaboraciones con la cadena de supermercados Target o una exitosa línea de accesorios. Para 2018, la expansión de la marca incluirá otro paso importante, ya que lanzará a la venta su primera fragancia. Con esos pasos, Hernández y McCollough se están asegurando un sitio de mayor importancia en la moda global.