LA AVENTURA ESPACIAL DE LA SOYUZ T-15
DOS COSMONAUTAS SOVIÉTICOS PASARON 125 DÍAS EN EL ESPACIO Y DIERON MIL 980 VUELTAS A LA TIERRA. ES LA ÚNICA MISIÓN QUE HA VOLADO ENTRE ESTACIONES ESPACIALES, NUNCA MÁS SE HA REALIZADO SEMEJANTE AVENTURA
En 1986, las dos potencias espaciales, la Unión Soviética y Estados Unidos, vivieron dos eventos muy distintos, el éxito y la tragedia. En enero de 1986, el Transbordador Challenger explotó tras despegar, siete astronautas murieron. La tragedia acaparó los titulares mundiales y se relegó al olvido una gran misión, única en la historia de la exploración espacial.
Veintidós días después, el 20 de febrero, la Unión Soviética llevó al espacio a su octava estación espacial, el Complejo Orbital Mir.
Tres semanas después, el 13 de marzo, despegó la nave espacial Soyuz T-15 con la primera tripulación de la Mir, los cosmonautas: Leonid Denisovich Kizim y Vladimir Alexevich Solovyov, ambos laureados como Héroes de la Unión Soviética.
Dos días después, la Soyuz alcanzó a la Mir, ubicada a 350 km de altura. Todos los satélites, naves y estaciones espaciales se mueven alrededor de la Tierra a 8 km/s, las naves espaciales aceleran o desaceleran para acercase o alejarse de las estaciones. Kizim dijo después, que la Mir le pareció como una gaviota blanca con sus alas extendidas volando sobre la Tierra.
Al atracar en la Mir, los cosmonautas esperaron más de una hora al cese de las vibraciones causadas al acoplarse y verificaron que la atmósfera en la Mir fuese respirable.
Una vez abordo, Kizim y Solovyov encendieron las computadoras, revisaron la seguridad, orientación, electricidad y descargaron el equipo que transportaban, recibieron dos cargueros espaciales Progress con más equipo, combustible y alimentos.
En 51 días prepararon a la Mir para los futuros habitantes. Acto seguido, cuando todo lo que debían hacer se había hecho, abordaron la nave espacial Soyuz T-15, cerraron la escotilla y se separaron de la Mir. Pero no emprendieron el regreso a la Tierra, su misión estaba lejos de terminar, muy lejos, tenían otro destino.
En una maniobra sin precedentes, la nave Soyuz encendió sus motores y tomó ruta hacia la Estación Espacial Salyut 7.
Kizim y Solovyov la habían tripulado durante 237 días en 1984, la conocían bien.
La Salyut 7 tenia acoplada la nave Kosmos 1686, que funcionó como módulo, remolcador y carguero. La Salyut estaba abandonada, con varios experimentos inconclusos, necesarios para las actividades en la Mir.
Meses antes, en noviembre de 1985, el comandante de la Salyut 7, Vladimir Vasyutin enfermó de gravedad. Los cosmonautas partieron en la Soyuz T-14, en un dramático regreso de emergencia para que Vasyutin recibiera la atención médica en la Tierra. La emergencia suspendió el vuelo original de la Soyuz T-15C, con una tripulación exclusiva de mujeres cosmonautas.
Entonces, se hizo necesario enviar una misión a la Salyut 7 y concluir los experimentos, pero sólo había una Soyuz, la T-15, ya que a la próxima generación, la Soyuz TM, le faltaba un año para recibir su certificado de seguridad, y los responsables de los vuelos tripulados no lo apresurarían, la vida de los cosmonautas se pondría en riesgo.
Entonces, decidieron realizar una aventurada misión, volar a la Mir y a la Salyut 7 con una sola nave espacial, algo jamás hecho ni antes ni después.
El 5 de mayo, la Soyuz T-15 se alejó de la Mir y se dirigió a la Salyut 7, ubicada a 4 mil km de distancia y 24 horas de viaje.
La Salyut 7 estaba consumiendo mucha electricidad y no sabían por qué. Al no encontrar la causa después de varios días, los cosmonautas hicieron un puente entre las conexiones, librando varios circuitos y funcionó, la Salyut era operacional de nuevo.
No era la primera vez que se rescataba a la Salyut 7. En 1985, en otra emocionante aventura, los cosmonautas de la Soyuz T-13 recuperaron a una errante Salyut 7 que volaba a la deriva en la órbita terrestre.
En la Estación, Kizim y Solovyov concluyeron los experimentos, salieron en dos ocasiones al espacio abierto a recuperar experimentos del exterior y cargaron en la Soyuz 400 kg de equipo.
Mientras esto sucedía, la Soyuz TM-1 de prueba y sin tripulantes, arribó a la Mir el 23 de mayo y regresó a la Tierra el 29.
El 25 de junio, tras 51 días, los cosmonautas partieron de la Salyut 7, fueron sus últimos tripulantes. Una vez más, no podían regresar a la Tierra el equipo y los experimentos, se necesitaban en la Mir. Entonces, los cosmonautas volaron a la Mir, a 2 500 km de distancia, en un viaje espacial de 29 horas.
En el Centro de Control consideraron que en los tres meses en el espacio, Kizim y Solovyov habían hecho más que suficiente, por lo que adelantaron su regreso para darles un merecido descanso.
El 3 de julio, Kizim superó el récord de 362 días acumulados en el espacio de Valery Ryumin y el día 6 es el primero en acumular un año en el espacio, llegando hasta 374 días. Solovyov acumuló 361 en dos viajes espaciales, se convirtió en el Director de Vuelo de la Estación Mir y luego colaboró en la actual Estación Espacial Internacional.
En los últimos días, Kizim y Solovyov realizaron observaciones terrestres. El 16 de julio partieron de la Mir, la cual quedó lista para su actividad, que duraría hasta 2001.
El regreso a la Tierra fue sin complicaciones y sólo entonces pudieron informar al Centro de Control ¡Misión Cumplida! Habían pasado 125 días en el espacio y dieron mil 980 vueltas a la Tierra. Es la única misión que ha volado entre Estaciones Espaciales, nunca más se ha realizado semejante aventura. No por nada, la antigua Unión Soviética y la actual Rusia, fue y es líder en el vuelo espacial tripulado.
En noviembre de 1985, el comandante de la Salyut 7, Vladimir Vasyutin enfermó de gravedad. Los cosmonautas partieron en la Soyuz T-14, en un dramático regreso de emergencia para que Vasyutin recibiera la atención médica en la Tierra.