Reforma a pensiones en Brasil pierde apoyo

El apoyo a la emblemática reforma de pensiones de Brasil está languideciendo, mientras el gobierno reconoce en privado que sus esfuerzos por aprobar la medida clave de austeridad reciben cada vez menos apoyo.

En tanto el Congreso vuelve a reunirse después de un receso de un mes, un asesor presidencial le dijo a Bloomberg que actualmente alrededor de 240 a 250 diputados respaldan el proyecto de ley, menos que los 270 en diciembre, y mucho menos que los 308 necesarios. Los legisladores todavía planean enviar el borrador del texto a la cámara este el martes, y una votación está programada para el 19 de febrero.

Tanto los inversionistas como los encargados de política consideran que la reforma al sistema de pensiones es crucial para fortalecer las cuentas fiscales y controlar la deuda. El proyecto de ley originalmente se proyectó para ahorrar de 750 mil a 800 mil millones de reales (de 230 mil a 246 mil millones de dólares) en diez años, pero a fines de noviembre el gobierno dijo que solo ahorraría alrededor del 60 por ciento de ese monto, después de que la propuesta fuera repetidamente diluida.

Ahora el gobierno del presidente Michel Temer acordó realizar al menos dos cambios adicionales al texto, que incluyen permitir a los brasileños acumular pensiones y crear una regla de transición para los funcionarios que comenzaron antes de 2003.

Pero es poco probable que los cambios hagan una gran diferencia. Efraim Filho, líder en la cámara baja del partido aliado al gobierno DEM, le dijo a Bloomberg por mensaje de texto que los cambios discutidos en el texto de la ley de pensiones no atraerán más apoyo. Sin embargo, el presidente de la cámara baja, Rodrigo Maia, dice que no tiene intención de eliminar la votación de la agenda de la cámara antes del 20 de febrero.