Se detendrá en 24% la participación de renovables
El cambio climático dejó de ser un asunto puramente de buenas intenciones y planeación a futuro para convertirse en una urgencia de política económica que se debe de comenzar a implementar inmediatamente. El sector eléctrico contribuye con 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero y al no priorizar a las energías renovables en el despacho a la red, la nueva Ley de la Industria Eléctrica aprobada en el Congreso pone en una situación de altísima vulnerabilidad al país, consideraron expertos.
José Ramón Ardavin, del área de análisis y modelos del Cespedes, explicó que mientras hoy se genera 24% de la energía con fuentes limpias, se requiere llegar al 35% en 2024 según los compromisos del Acuerdo de París del 2015 y otra Ley vigente, de Transición Energética. Esos 10 puntos adicionales sólo son posibles con generación eólica y solar que tienen programas de inversión y resultan negocios rentables y atractivos para inversionistas. Pero los cambios en la ponderación del despacho a la red, que ponen primero a la hidroeléctrica, después a todas las plantas de la CFE y hasta el tercer lugar a estas energías harán que se estanque esta participación que incluso puede reducirse.
María Teresa Souza Bosh, ex directiva de la Semarnat, explicó que será imposible tener la hidroeléctrica como energía base porque el consumo de agua de las presas depende de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) más que de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ya que el agua sirve para mitigar sequías e inundaciones que cada vez serán más y más impredecibles por el cambio climático.
Casiopea Ramírez, consultora de Fresh Energy Conulting, explicó que al eliminar la obligación de que la CFE adquiera como único instrumento energía mediante subastas, se regresa al modelo de opacidad en que compraba mediante contratos bilaterales discrecionales a empresas de energía fósil. Verónica Irastorza, directora asociada en Nera Economic Consulting, explicó que sólo el año pasado, la combinación de energía solar y eólica tuvo una generación de 33 terawatts, que de haber utilizado gas natural habrían implicado un costo en combustible de 46,000 millones de pesos.
Los cambios en el despacho a la red, que ponen primero a la hidroeléctrica y después a todas las plantas de la CFE harán que se estanque o se reduzca esta participación”. José Ramón Ardavin,
DIRECTOR EJECUTIVO DEL CESPEDES