HILO diario
• Van en serio para disuadir fiestas privadas • Jornaleros agrícolas, asignatura pendiente vs Covid-19
LA FOTOGRAFÍA LOGRADA POR FERNANDO Castro pone en evidencia una realidad, los jornaleros agrícolas, sí, esos que se...
LA FOTOGRAFÍA LOGRADA POR FERNANDO Castro pone en evidencia una realidad, los jornaleros agrícolas, sí, esos que se encargan que usted y yo tengamos qué comer en nuestras mesas, se están convirtiendo en una asignatura pendiente en donde no se ve que el sector Salud esté tomando cartas en el asunto. En momento en que se anuncia un nuevo decreto, donde hay que usar cubre bocas de manera obligada, el viajar solo dos personas en auto, uso de gel, lavado de manos, la sana distancia, los trabajadores del campo, son transportados hacinados y sin ninguna protección. Pareciera que para ellos no llegan las recomendaciones que diariamente se emiten por radio, televisión, periódico o internet. ¿De quién es responsabilidad el que se les brinde esa seguridad?, ¿Sector Salud?, ¿Secretaría del Trabajo?, lo cierto es que en esta fase en la que se mencionan ya a los contagios comunitarios, se hace necesario adoptar medidas en este sector. Al menos las dos camionetas que fueron fotografiadas el sábado pasado, se observaron decenas de trabajadores en las cajas de las mismas. Va el llamado al titular del sector Salud en Delicias, el doctor Ricardo Villa Arias, que sería positivo salir de su oficina y se diera una vuelta donde se encuentran los jornaleros agrícolas. Aunque a decir verdad, mantiene desde hace semanas una sana distancia de todos.
LOS QUE TUVIERON bastante chamba disuadiendo fiestas privadas fueron los policías del avecina población de Meoqui, y aplicando la frase del alcalde, Ismael Pérez Pavía, “vamos a ver quién se cansa primero”, le dieron varios rondines a las comunidades de ese vasto municipio. Y como sucede cuando se conmina a la población a respetar normas o reglamentos, siempre habrá quienes bajo cualquier excusa pretenden pasar por encima de la Ley y acusar a los agentes de violentar sus derechos humanos.
Para este tipo de personas no importa la contingencia ni que ya sumen cinco casos de coronavirus en la región, de los cuales dos están en Meoqui. No, nada de eso, la cosa es pistear con amigos, y que pase lo que tenga que pasar, pero no me molesten, en un franco desafío a la salud de todos.
Los hechos que le voy a comentar sucedieron en una vivienda de la vecina población de Lázaro Cárdenas, donde la verdad todo puede suceder. Resulta que los policías recibieron varios reportes de una familia que estaba alterando el orden público. Al llegar encontraron a varios vecinos en franca convivencia, acompaña dos de las clásicas cervezas, jóvenes, adultos y niños, todos en un mismo espacio. pareciera que no les habían avisado que hay un contagiado de Covid en esa misma comunidad y por ende deberían adoptar las medidas para prevenir los llamados contagios comunitarios. Nunca pensaron que les iban a cumplir la ley, que no quedaría solo en palabras, y tras tres llamadas de atención, se ordenó el arresto de un sujeto que se encontraba en dicha reunión, desafiando a los agentes con palabras altisonantes, y que justificaba la fiesta que se estaba celebrando. Pues este valiente pasó la noche en el Security Resort de Meoqui, con minisplit, cobertores y “room service” de lujo. El mensaje para la población es que abusados, no se trata de ver el tema de la contingencia de manera individual, egoísta, sino como una sociedad comprometida y responsable, y que de no acatarse las disposiciones se procederá con el protocolo.
Lo interesante es que al buen amigo ismaelpérezpaví aparece no interesarle el costo político, cuando de salvaguardar el interés colectivo se refiere.
La ordenes detener a quienes se quieran pasar de listos y sigan organizando fiestas privadas.