Muere tras ir por cervezas
Se habría quitado la vida con una pistola un militar
VALLADOLID.— Ayer alrededor de las dos de la madrugada un militar fue encontrado muerto en una casa de la calle 14 entre 37 y 39, a unos 100 metros de la 32a. Zona Militar.
Desde hace muchos años en ese predio funcionó la cantina “El Coyote”, pero al parecer cerró sus puertas como negocio establecido.
La propietaria, identificada como “Flor”, presuntamente siguió vendiendo cervezas ahí aunque de manera clandestina, cuyos clientes en su mayoría son militares, incluso bebían dentro de la casa en cuyo garaje tenía una pequeña mesa.
Una persona afirmó que en la madrugada pasó por el lugar y observó al soldado acompañado de otro sujeto, del cual no se sabe nada, al menos oficialmente.
Media hora después de estar bebiendo se escuchó un disparo.
Al salir la propietaria vio el cuerpo del militar (algunos dicen que pertenece a la Guardia Nacional) tendido en el piso con un disparo en la cabeza, pero no se encontró a nadie más en el lugar.
Se presume que el arma es una pistola 9 milímetros, al parecer perteneciente a la citada corporación, cuyos elementos arribaron al lugar de los hechos para participar en las investigaciones.
El lugar se llenó de policías municipales, estatales, incluso del Ejército y la Guardia Nacional, de tal manera que a las 11 de la mañana no habían levantado el cadáver, pues durante varias horas los peritos de la Fiscalía General del Estado realizaban las diligencias correspondientes.
Agentes de la Policía Estatal de Investigación iniciaron las pesquisas y dialogaron con vecinos para conocer más sobre el hecho.
Una persona identificada como “Luis” fue detenida para investigarla porque, se presume, trabajaba en el lugar como mesero. Se lo llevaron, pero no se sabe a dónde.
Alrededor del mediodía se recibió un informe oficial por este fallecimiento, pero se dio como un suicidio.
También se explica que el mismo sujeto se disparó en la cabeza con el arma de fuego y el cuerpo quedó tendido en el garaje de la casa.
Algunos vecinos afirmaron que en esa casa desde hace algunos años se venden de manera clandestina bebidas embriagantes y que la Policía Municipal lo sabe, pero que cada semana los agentes pasan al lugar por su “mochada” para que se hagan de la “vista gorda”.
Una vecina comentó que desde hace tiempo dijo que “no tarda y hay un muerto en ese lugar”, hasta que ayer ocurrió.—