Al rescate
Grandes desafíos en la industria de la madera estatal
La industria maderera está estática. No avanza, entre otras razones porque la lejanía del estado impide el acceso a tecnología y maquinarias, la competencia desleal que representa la tala ilegal de árboles —significa una desventaja del 50% en costos— y la falta de apoyo del gobierno, afirmó Daniel Xool Alcocer, nuevo presidente de la Cámara Nacional de la Industria Maderera delegación Sureste.
Al asumir ayer el cargo junto con la nueva directiva, manifestó que “se ha mantenido aletargado nuestro sector”, pero ahora se buscará rescatarlo con esta nueva directiva. Rescataremos algunas ideas que se habían archivado, anticipó.
El estado se encuentra en un rincón del país, de manera que el flujo de materias primas, maquinarias y tecnología se mantiene lejano; si nos comparamos con otras regiones que tienen bastante desarrollo, como el Bajío y el centro del país, entonces podemos decir que “estamos en pañales”.
También dijo que la Cámara tiene que afiliar a más socios y el gobierno los debe tomar en cuenta para que las empresas madereras puedan tener acceso a los apoyos que permitan modernizar la planta y capacitar a sus trabajadores.
Xool Alcocer recalcó los perjuicios de la tala ilegal de árboles. Nosotros compramos maderas que tienen certificación, que vienen con permisos de aprovechamiento, que representan un costo debidamente facturado, que venga de un bosque sustentable y otros requerimientos de las autoridades.
Pero con la tala ilegal, precisó, se hacen muebles a costos muy inferiores a los de negocios establecidos.
Yucatán durante 40 años fue deforestado pero ya se aprobó una ley para reforestarlo, dijo. Y se va a trabajar con la Conafor para que las futuras generaciones puedan disfrutar de mejores selvas, que hoy día son muy escasas y con árboles con diámetros muy pequeños.—