Sinusitis, bronquitis y neumonía por el reflujo
Ardor de lengua, salivación, ardor de garganta, carraspera y tos seca, son algunos de los síntomas y signos sugestivos que la saliva se está convirtiendo en una secreción ácida.
Las secreciones de las glándulas salivales, de por sí alcalinas, son incapaces de neutralizar el pH bajo que caracteriza a la acidificación del terreno de la garganta, nariz y senos paranasales. Incluso, sinusitis —inflamación de las cavidades anexas a la nariz—, laringitis —donde se encuentran las cuerdas vocales que nos permiten
————— (*) Otorrinolaringología. Niños y adultos. Consultorio 423. Star Médica. Téléfono 9991-961514. emitir la voz, que en estos casos se torna ronca— y hasta bronquitis y en algunas ocasiones neumonías (inflamación de los espacios aéreos de los pulmones), pueden estar asociadas a este reflujo.
Por desgracia, poco se piensa en esta posibilidad y más, relativamente se descarta con una endoscopía cuando se ven las estructuras normales.
Lo aconsejable es realizar estudios del funcionamiento del esfínter esofágico inferior (hiato esofágico), mediante estudios de la tensión de éste (manometría) y medición del pH (pH-metría), para descartar por completo que el ácido del estómago esté refluyendo hacia arriba.