Ataca a “dreamers”
Trump afirma que es una “trampa” de los jóvenes ilegales
WASHINGTON (EFE).— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió ayer ante legisladores republicanos que a los jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños no se les debe llamar “dreamers” (soñadores) y les avisó de que no caigan “en esa trampa”.
“Alguna gente los llama “dreamers” . No son “dreamers”, no caigan en esa trampa”, dijo Trump.
El mandatario hizo ese comentario durante su intervención en la reunión invernal de los legisladores republicanos en Virginia Occidental, al referirse a la situación de los inmigrantes que llegaron al país siendo niños de forma irregular y cuya protección a la deportación, por orden suya, termina el 5 de marzo.
“Tengo a muchos “dreamers” aquí delante”, agregó al apuntalar aun más el argumento que esgrimió este martes durante su primer discurso del Estado de la Unión, alegando que no solo estos jóvenes sueñan, sino que también lo hace el pueblo estadounidense.
Cuando en septiembre pasado Trump decidió poner fin al programa conocido como DACA, impulsado por su predecesor Barack Obama y que supuso un alivio a la deportación para alrededor de 800,000 jóvenes, el magnate neoyorquino instruyó al Congreso para que hallara para ellos una solución legislativa permanente.
Republicanos y demócratas han estado negociando durante meses al respecto, y hace unas semanas encontraron un principio de acuerdo que cumplía los requisitos exigidos por la Casa Blanca, sin embargo el presidente se negó a dar luz verde a esa medida.
Propuesta
A cambio, la Casa Blanca presentó la semana pasada su propia propuesta, con una línea mucho más dura en materia de seguridad fronteriza, eliminando la posibilidad de reunificación familiar y la lotería de visas, pero creando un camino para la ciudadanía a 1.8 millones de jóvenes.
“Di un número muy generoso (de posible regularización de inmigrantes) para saber qué tan interesados están o no en lograrlo”, explicó el presidente a la audiencia
republicana.
En este sentido, Trump instó al Senado a someter a votación su propuesta migratoria, teniendo en cuenta que en las próximas semanas comenzarán los debates sobre la cuestión.
“Es una ley firme, pero es una ley justa”, reiteró.
El debate sobre cómo regularizar a estos jóvenes se ha instalado en el Capitolio, generando con su falta de consenso que se incurriera incluso en un cierre parcial de la Administración federal hace dos semanas.
Por otra parte, un juez de distrito, abogados y activistas proinmigrantes advirtieron ayer que la presencia de agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) en las cortes, en busca de indocumentados para deportar, socava el sistema judicial y puede tener consecuencias peligrosas.
Según una directiva conocida esta semana y firmada por el director interino de ICE, Thomas Homan, sus agentes están autorizados a actuar en las cortes federales, estatales y locales en busca de inmigrantes que puedan ser una amenaza a la seguridad pública.
“La gente ya tenía miedo de ir a la corte, y más lo tendrá en el futuro”, declaró el juez Kevin Burke, de la Corte de Distrito de Mineápolis.