Perdido el alcalde de Coatza; su municipio, entre los más violentos del mundo
En el marco del grave ambiente de inseguridad en el que vive el estado y afecta a todos los veracruzanos, se dan hechos y declaraciones que reflejan el sentir de la gente y lo que le exige al gobierno.
Por un lado está el hecho que denuncia un mando policiaco en Coatzacoalcos, quien asegura que el alcalde Víctor Carranza le ofreció dinero para que renuncie al cargo.
Más allá de quien lo haya designado y de quien o quienes tengan ascendencia sobre él, esta maniobra del munícipe porteño refleja su desesperación por tener el control de su propia policía.
Lo declarado por el comandante de la Policía Municipal, Víctor Colorado Fernández, evidencia el hecho de que no es el alcalde quien manda en su propia corporación y que el control de la seguridad municipal se le fue de las manos. Mientras, la delincuencia ha convertido a Coatzacoalcos en uno de los primeros municipios a nivel nacional con índices delictivos altos, donde han sido víctimas mujeres, niños, maestros, médicos, empleados, comerciantes… Además de evidenciar al alcalde, el mando policiaco pone en entredicho la seguridad de los vecinos del antiguo Puerto México.
Así lo dijo el comandante: La renuncia “me fue solicitada el sábado al asistir a una reunión, para decir que es por motivos de salud o familiares, luego le indicaron al tesorero darme lo que pida”.
Pero Víctor Colorado argumentó que “la cosa no es así, estoy trabajando con muchas limitaciones y considero que vamos bien, pero no hay respaldo; hay 36 casetas abandonadas, desde el año pasado solicité su rehabilitación para destacar elementos en ellas y nada”.
Pero además hizo otro señalamiento directo: “Desde hace un año elaboré el reglamento de policía, lo envié al alcalde y es momento que aún no se aprueba, lo mismo que los exámenes para que nuevos elementos vayan a la academia ya los envié y no me los han autorizado; ésas y muchas otras acciones hay que darles seguimiento en la Plataforma México, pero no hay avances”.
No es la primera pifia de Carranza Rosaldo, quien desde su llegada a la alcaldía ha enfrentado problemas, como la basura en las calles de la ciudad, la escasez de agua, los reclamos y paros del sindicato de empleados municipales, las marchas de médicos contra la inseguridad, las manifestaciones de empresarios y comerciantes por la misma razón y las protestas de trabajadores despedidos, entre otros temas.
Éste, el de Coatzacoalcos, es uno de esos temas que han trascendido las fronteras estatales y del país y que evidencian la falta de seguridad y la ausencia de tranquilidad para los veracruzanos.
Pero el tema no se queda ahí, pues hasta Veracruz vino el presidente nacional de Canacintra, Enoc Castellanos Férez, a decirle al gobierno y a los habitantes y a quienes visitan la entidad, que los empresarios están huyendo del territorio estatal, quienes se han tenido que ir del estado por los problemas de inseguridad.
Esos empresarios veracruzanos afiliados a la cámara de Enoc han optado por “huir” a lugares como Cancún, Puebla y la Ciudad de México.
Para el dirigente empresarial “es una realidad, el problema de inseguridad de Veracruz no se puede tapar con un dedo y es manifiesto. Coatzacoalcos acaba de ingresar en el número 26 dentro de las 50 ciudades más violentas del mundo, con alrededor de 44 asesinatos por cada 100 mil habitantes”.
Por eso es un tema que no se puede ocultar al estar catalogada como una de las ciudades más violentas en el mundo, lo que ha provocado que una tercera parte de las residencias en esa ciudad estén en renta o a la venta, “lo que es imposible negar”.
Qué triste el papel que están jugando los gobiernos de la cuarta transformación que no terminan de asimilar que ya son gobierno y que les corresponde la tarea de gobernar para todos sin importar colores ni ideologías partidistas ni religiosas.