MIRIAM RAMÍREZ PIDE AYUDA PARA RECIBIR QUIMIOTERAPIAS
LA JOVEN MADRE DE FAMILIA CARECE DE RECURSOS PARA COSTEAR LOS MEDICAMENTOS Y TEME QUE SU ENFERMEDAD SE AGRAVE Y ESTO DEJE A SUS 3 PEQUEÑOS EN ORFANDAD
Miriam Jacqueline Ramírez de 29 años fue diagnosticada con cáncer de su mama en su seno izquierdo, que le fue retirado el 3 de abril y recibió dos quimioterapias en el ISSSTE de León.
Pero su esposo se quedó sin trabajo y ella sin servicio médico. Ahora busca que no se interrumpa su tratamiento porque, aunque acudió a la Secretaría de Salud de Guanajuato, le han informado que su cita será hasta el 21 de junio.
Miriam considera que está en riesgo porque antes de esa fecha tendría que recibir por lo menos dos quimioterapias más y medicamentos, pero no tiene recursos económicos para costearlos.
Desde su hogar en el Andador Guanajuato 105 de la colonia San Isidro, acompañada de su esposo y sus tres hijos pequeños, pidió apoyo para encontrar una solución y que siga recibiendo las quimioterapias conforme se tienen programadas.
“Ese es mi miedo, que se interrumpa mi tratamiento contra esta enfermedad y que me agrave; yo todavía tengo por quien ver y por quien luchar para estar aquí, mis tres menores hijos me necesitan”, dijo con lágrimas en los ojos.
ATENCIÓN MÉDICA ES TARDADA “Cuando fui al Centro de Salud y me dieron la fecha de atención le dije a mi esposo 'aquí me voy a morir, va a tardar mucho que llegue la atención médica'”, por ello le preocupa que se interrumpa su tratamiento.
Miriam narró que en el ISSSTE le dijeron que su tumor medía seis centímetro y que después de medir cinco centímetros estos empiezan a 'arrojar' tumores por todo el cuerpo; “ese es mi miedo, si no me hago la tomografía, no sabré si los tengo en otro lado de mi cuerpo”, dijo.
Ante la difícil situación que enfrenta decidió hacer público su caso en redes sociales y la gente se ha ofrecido a hacer rifas e incluso personas de Estados Unidos le han brindado ayuda.
“Les agradezco de todo corazón,
Miriam Ramírez
PACIENTE ONCOLÓGICA
Ese es mi miedo, que se interrumpa mi tratamiento contra esta enfermedad y que me agrave; yo todavía tengo por quien ver y por quien luchar para estar aquí, mis tres menores hijos me necesitan”
Dios no me va a abandonar y me va a poner mucha gente buena en mi camino como una doctora que conocí en el ISSSTE de León, ella alimenta mi ánimo, me da mucha fuerza, ella pasó por lo mismo”.