Evangelina Avendaño
siguiendo el ejeMplo de Mujeres inspiradoras
Contar con el ejemplo de una mujer profesional que ha logrado alcanzar sus sueños es el elemento más poderoso e inspirador para seguir adelante. “En mi carrera he contado con muchos de esos ejemplos, que me siguen impulsando a ser mejor cada día, por lo que en mi agenda siempre trato de tener los espacios para conversar y conectar con mujeres que desean también seguir sus sueños”, explica la máxima responsable financiera de EY Centroamérica. Para llegar hasta donde hoy está, Avendaño tomó un mensaje de su padre, y se “programó” a sí misma para estar consciente de que sus decisiones actuales le deben acercar al escenario en el que quiere estar en cinco años. Hace ocho años tomó sin titubear el puesto de CFO en EY, “reacción que según literatura que he leído no es usual en las mujeres profesionales”. Adicional a ello, apunta como claves para ser lo que es hoy el aprendizaje constante, identificando desde el inicio a las personas que le podían aportar en su caminar en la empresa; y otro fundamental: “aprender a acelerar y desacelerar cuando se requiera”, tratando de balancear familia y trabajo.
Para Evangelina Avendaño, lo más “retador” de su labor siempre ha sido asignar a la persona correcta en el puesto correcto; y lo más gratificante, ser “testigo de la chispa que se enciende en los ojos de quien logra sus proyectos”.
Participa en Vital Voices Costa Rica, organización que impulsa el liderazgo femenino, “experiencia que me ha permitido sensibilizarme en el tema”.
País: Costa Rica
Cargo: Regional Chief Financial Director en EY Central America
Edad: 49 años
Su mayor logro: Haber dirigido hace varios años mi mirada hacia adentro, y haber iniciado un proceso de auto-conocimiento que me ha llevado a ver la vida con un prisma diferente, permitiéndome un aprendizaje más profundo de mi existencia, y que ha modelado la forma en que percibo los retos que vivo en mi camino temporal por este planeta llamado Tierra.
Sueña con: Un país que brinde la oportunidad de acceso a la era digital a todos sus habitantes, donde tanto mujeres como hombres tengan la misma posibilidad de desarrollar su intelecto y sus talentos.