Corrosión amenaza el histórico puente de Choluteca
En sus casi 80 años de funcionamiento, el paso solo ha recibido un mantenimiento que se ejecutó en el año 2002. El óxido en las estructuras laterales y los baches en la capa asfáltica son la huella del abandono del monumento nacional
Para un cholutecano que viaja desde cualquier rincón del país o del mundo, cruzar el puente colgante sobre el río Grande significa llegar a casa.
Apreciar la imponente estructura construida de metal, con cimientos lo suficientemente fuertes para soportar el caudal del río Choluteca durante 80 años, hace que todos los que nacieron en la localidad se sientan representados por la obra, cuyo verdadero nombre es Tiburcio Carías Andino.
Pese a ser un ícono de la ingeniería estadounidense en el país, ya que es una réplica del famoso Golden Gate de San Francisco, la estructura representa la unificación del tráfico entre los países de Centroamérica.
La obra construida entre los años 1935 y 1937, por la United States Army Corps of Engineers, tiene 300 metros de largo y fue hecha para unir la carretera Panamericana que recorre todos los países de la región.
La estructura fue inaugurada en 1938 y desde su fundación apenas ha recibido una restauración en el año 2002, durante el mandato de Ricardo Maduro. Los trabajos estuvieron a cargo de la compañía Salinas y Cardona.
En aquel momento, el deterioro de la capa de rodadura o asfáltica volvía intransitable la estructura para vehículos y peatones.
Por lo anterior se aprobó una partida de 22 millones de lempiras para remozar el puente, en ese entonces se reconstruyó la capa asfáltica y se limpió la corrosión utilizando máquinas a presión que desprendían arena para retirar el óxido.
Además, la municipalidad aprobó una ordenanza que prohibía el tránsito de furgones para evitar el deterioro del puente.
Desde esa intervención la estructura no ha recibido ningún tratamiento preventivo más que una inversión de 50 mil lempiras que realizó la actual administración municipal para iluminar el paso.
Daños
Una vez más la corrosión invade los espacios interiores y exteriores del puente, lo que amenaza las estructuras laterales.
Además, la capa de rodadura comienza a presentar daños pequeños que, de no atenderse, podrían derivar en un problema mayor.
Óscar Osorio, ingeniero residente en Choluteca, comentó que el problema más serio en el puente es la corrosión, ya que puede debilitar la estructura.
“Los pernos, objetos que unen las piezas, están oxidados y llega un punto en que la corrosión los debilita y es allí cuando se pueden presentar problemas”, comentó.
Mantenimiento
Para Osorio el puente debe tener un mantenimiento programado cada cinco años, pero desde hace una década permanece en el olvido pese a que en el mes de noviembre del 2015 el Congreso Nacional lo declaró Monumento Nacional.
Gaspar Obando, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Honduras (CICH), instó al gobierno a nombrar una comisión que inspeccione la estructura y determine qué acciones tomar.
“Una estructura tan esplendorosa como el puente de Choluteca no puede estar en el olvido, es una de las estructuras más importantes del país que representa a toda una región, por lo tanto, debe ser atendida”, dijo el directivo