Lafattoria alega que existe millonaria deuda por la alimentación en cárceles
Gobierno señala que no tendrá relación con proveedores con posibles vínculos con el crimen organizado.
El servicio de provisión de comida en las cárceles del país entró en conflicto. Después de que Lafattoria decidió suspender el servicio en las cárceles del norte del país, el Gobierno de Daniel Noboa ha pedido investigar a esta empresa.
La Presidencia introdujo una notitia criminis en la Fiscalía para que se investiguen presuntas irregularidades en la provisión de este servicio.
Esta empresa es la que ha estado dando el servicio en las cárceles en los últimos años. No tiene un contrato, pero se mantuvo a través de convenios de pago. En el documento que presentó la Presidencia constan informes del centro de inteligencia estratégica sobre supuestos actos ilícitos de carácter penal en los que estaría involucrada la compañía proveedora. Dicha información fue clasificada como secreta.
El Gobierno habla de que hay una conducta monopólica. “Toda conducta monopólica será investigada y puesta a órdenes de las autoridades”, indicó en un comunicado.
Además, indicó el Gobierno que “no establecerá relación con proveedores cuyos vínculos sugieran conveniencia con el crimen organizado”.
Lafattoria S. A., del grupo Riasem, la compañía que provee la alimentación en las cárceles de Esmeraldas, Carchi, Imbabura, Sucumbíos, Pichincha, Santo Domingo, Napo y Cotopaxi, también da el servicio en los cinco reclusorios que conforman el complejo penitenciario del Puerto Principal del Ecuador.
En los recintos carcelarios del norte del país, donde hay alrededor de 11.400 internos, la firma no tiene un contrato y prestaba el servicio a través de convenio de pago, una figura que se debe dar en casos extraordinarios. Mientras, con Guayaquil sí hay una relación contractual.
Pero en ambos casos el problema es la falta de pago. En días anteriores, Richard Villagrán, presidente del grupo Riasem, indicó a este Diario que respecto a Guayaquil el Gobierno nacional adeudaba cinco meses y medio hasta la primera quincena de abril.
La firma anticipó que el servicio de alimentación en el complejo carcelario de Guayaquil también podría suspenderse por la deuda del Gobierno con la empresa, la cual asciende a $ 28 500.000, valor que abarca el servicio de alimentación en los territorios 1 (cárceles del norte del país) y 3 (complejo carcelario de la urbe porteña) y también el Programa de Alimentación Escolar (PAE), puesto que Riasem también es proveedor de ese servicio desde hace ocho años.
Villagrán señaló que históricamente siempre han existido estos retrasos, pero que en los últimos dos años la situación se ha agravado.
Tras la notitia criminis que puso el Gobierno, Lafattoria emitió un pronunciamiento el pasado jueves. La firma indicó que brinda servicios de alimentación a 25 cárceles a nivel nacional en las zonas 1 y 3 del país, y no en el 100 % de cárceles. Indicó que se quiere evidenciar un supuesto monopolio, “lo cual no es real porque otro proveedor atiende la zona 2 del país”.
La empresa indicó que “están abiertos a las investigaciones que consideren pertinentes y siempre dispuestos a colaborar con el cumplimiento de la ley, pero asimismo esperan que no sea un acto de retaliación política ni una estrategia del Gobierno nacional para no cancelar el dinero adeudado”.
Villagrán destacó en abril pasado, durante una entrevista con este Diario, que el servicio se ofrece con rigurosos protocolos de seguridad, por lo que descartó que por medio de este haya irregularidades como el ingreso de armas u otros artículos prohibidos.
“Nosotros tenemos la trazabilidad, desde el agricultor hasta la puerta de la cárcel. Yo me hago responsable de toda esa trazabilidad y nos gastamos un montón de dinero para asegurarnos de que toda la trazabilidad sea controlada”, expresó él. Actualmente la empresa trabaja con más de 50 proveedores directamente, a ellos se suma la compra a pequeños agricultores y demás proveedores indirectos (que son más de 100) a través de una estructura adecuada para aquello.
Una misma empresa ha estado dando el servicio en los últimos años.