Socio Vivienda pasó de plan de interés social a centro de operaciones delictivas
En ese sector del noroeste de Guayaquil, uno de los más peligrosos de la ciudad, las bandas de delincuencia organizada desplazan de sus casas a propietarios para operar desde ahí.
Un centro de operaciones delictivas. Esa es la respuesta de jefes policiales y militares al describir a Socio Vivienda, uno de los sectores más peligrosos de Guayaquil, donde los grupos de delincuencia organizada (GDO), hoy considerados como terroristas por el Gobierno nacional, han desplazado de sus casas a los dueños.
Este sector del noroeste, perteneciente al distrito Nueva Prosperina, tuvo una intervención con el Bloque de Seguridad el jueves pasado.
Allí detuvieron a 19 personas y se allanaron 70 viviendas ubicadas en sitios estratégicos. Estas habían sido ocupadas por presuntos integrantes de la banda Los Tiguerones para realizar diversas actividades ilegales, como la venta de repuestos de carros robados, el cobro de ‘vacunas’ (extorsiones) a casas, locales y vehículos que ingresan al sitio, secuestro de personas, centro de extorsiones e incluso laboratorios exprés de preparación de droga para el microtráfico.
Así lo detalló el coronel Roberto
Santamaría, jefe policial del distrito Nueva Prosperina, que ingresó junto con una cuadrilla de 830 policías y 300 militares a esa zona.
Él explicó que este plan habitacional de ayuda social nació con las familias que fueron reubicadas del estero Salado, tanto del Suburbio como de la isla Trinitaria. Esto ocurrió a mediados del 2010, durante la presidencia de Rafael Correa.
El funcionario policial añadió que de momento Socio Vivienda, que pertenece a la parroquia Pascuales, tiene 3.000 viviendas en las que habitan más de 50.000 personas.
El jefe policial señaló que allí las economías delictivas se centraban en la extorsión de diversos tipos, como el cobro de una especie de alícuotas a quienes viven en ese sector, sin importar si son familiares o conocidos de los antisociales.
“Allí todos pagan. Tenemos las pruebas de los cuadernos donde llevaban la contabilidad de las ‘vacunas’. Le cobran a la familia, al vecino, al de la tienda, a cualquier vehículo que ingresa; hablamos de buses, taxis, tricimotos, motos lineales, absolutamente todo. Y si hacemos cuentas, estamos hablando de que ese sector mueve
Socio Vivienda está ubicada en el kilómetro 28 de la vía Perimetral.
mucho la economía criminal”, manifestó Santamaría.
La zona tiene una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) que incluso ha sido atacada por los delincuentes en varias ocasiones; también cuenta con un centro de salud del Ministerio de Salud que a veces está cerrado por la inseguridad.
Ese lugar fue intervenido en varias ocasiones debido a los ilícitos cometidos.