Si 2019 cerró,ó segúnú una experta en criminología, como un año extremadamente violento, el próximo necesitará políticas que frenen la violencia.
Las estadísticas marcarían una tendencia: entre 2018 y 2019 han aumentado los casos de robos y crímenes, datos que usa la perfiladora criminal Alexandra Mantilla para hablar del futuro del hampa.
Para explicar cuál será el futuro del hampa en 2020, la perfiladora criminal Alexandra Mantilla repasa los hechos que marcaron una ‘agenda delictiva’ en los últimos 12 meses: desde el incremento de homicidios intencionales hasta el paro nacional (y las fuerzas de choque). Entonces, declara: “Quizás 2019 se cerró para el Ecuador como el año más violento que el país ha vivido en los últimos 100 años”.
El proceso delictivo es “cíclico y vital”. Evoluciona. Y Ecuador, según Mantilla –graduada en Investigación Criminal en la Universidad de Córdoba (Argentina)–, no cuenta con políticas criminológicas de prevención para detener la delincuencia. No por ahora.
Según estadísticas del Ministerio de Gobierno, los robos a personas –uno de los delitos más recurrentes– han incrementado en un 9,41 % entre 2018 y 2019. “Ha sido una constante”, apunta la experta.
A esto se suma el fenómeno de la migración: “Quito, declarada ahora la ciudad más poblada del país, acoge a un alto índice de personas extranjeras”. Muchas han llegado en situación de calle (personas vulneradas en sus derechos) y eso, de alguna manera, los ha obligado a delinquir. No a todos.
Otro dato que llama la atención es el incremento de homicidios intencionales entre 2018 y 2019: el 15,82 %. En total, hasta noviembre, se reportaron 1.054 casos. De ese número, el 5,69 % fueron femicidios y el 76,57 % asesinatos. “Y va a seguir creciendo la cifra”, sentencia Mantilla... hay un detalle más: “los homicidios ahora son más crueles”.
EL PARO NACIONAL
En Ecuador, sobre todo en Quito, se vivieron días intensos tras el anuncio del presidente Lenín Moreno acerca de la eliminación de subsidios al combustible.
Hubo 11 días de paralización. La quema de la Contraloría. Daños a la propiedad. Muertos. Heridos... y, según Mantilla, en ese lapso salieron a la luz, por primera vez, las llamadas “fuerzas de choque”, grupos organizados que atacan violentamente y que han sido previamente entrenados por
gente que tiene intereses políticos, explica Mantilla.
Eso puso en evidencia la “no preparación” de la Policía y el Ejército, añade, tras disgregar cada uno de los casos que se produjeron: secuestros a periodistas, ataques, quema de policía, militares golpeados, gente que perdió los ojos...
¿CÓMO VE EL 2020?
“Se presenta como un año en el que, por desgracia, no va a disminuir a la violencia”, sentencia Mantilla. Pero asegura que sí puede haber luz roja para frenar la delincuencia.
Lo que debe hacer el Gobierno, explica, es tomar “en serio” el tema de la criminología para establecer políticas de prevención en cuanto al robo, a los homicidios.
Entender, de acuerdo a las estadísticas expuestas, qué tipos de delitos son frecuentes y trabajar en ello.