¡Ñaño lo halló muerto!
Cuando se iba a acostar se dio cuenta de que su hermano tenía una puñalada en el tórax y otra en el cuello.
Llegó en la madrugada a dormir junto a su hermano y presuntamente lo encontró apuñalado en la cama. La noche del miércoles, Efraín Males fue visto caminando por el barrio Pisulí, norte de Quito, cerca a la casa donde vivía. Luego de unas horas apareció muerto de dos cuchilladas.
El joven, de 18 años, se habría dirigido al domicilio, ubicado entre las calles Joaquín Murrieta y Pablo Yerovi, en donde misteriosamente fue encontrado sin vida y con heridas en su cuello y tórax.
En la madrugada de ayer el ñaño de Efraín llegó a la vivienda a descansar, cuando se iba a acostar se dio cuenta que su hermano tenía un corte en el cuello y no respondía a sus insistentes llamados.
Según la información policial, el hombre enseguida salió del cuarto desesperado y comunicó lo sucedido a los vecinos, quienes dieron aviso a la policía del sector.
Los uniformados llegaron al sitio y solo lograron verificar la muerte del ciudadano.
Miembros de la Dinased y Criminalística en la inspección del cadáver observaron que tenía cerca de ocho heridas cortantes, las más visibles y posiblemente mortales serían dos del cuello y tórax.
La escena del delito fue asegurada para recabar huellas y evidencias del hecho violento e iniciar las investigaciones que determinarán el móvil del crimen y descubrir al o los sospechosos.
La mañana de ayer, en la morgue de la capital, se hicieron presentes familiares de Efraín, quienes se abrazaban y lloraban por la partida de su ser querido.
“Por favor, disculpe, no queremos decir nada”, manifestó uno de los deudos.
(HA)