La mipyme, el sector solitario que guerrea
El gremio pide un organismo que asesore e impulse su crecimiento ❚ Generan un 27 % del PIB ❚ Son el 90 % de todas las empresas
Las micro, pequeñas y medianas empresas (mipyme) de Ecuador se sienten solas en su guerrear para hacer negocios. La tramitología fuera de las ciudades principales todavía las agobia y la corrupción les mete la mano al bolsillo cuando quieren agilizar la salida de un documento. No es el único problema, pero sí uno de los más importantes, según aseguran pequeños productores consultados por EXPRESO, ante la pregunta de cuáles son los problemas que enfrentan.
La visión de ellos no difiere de lo que dijo uno de sus líderes. Francisco García, presidente de la Cámara de la Pequeña Industria de Guayas, destacó que es importante que exista un organismo especializado que los asesore y los impulse. “Ahora el Ministerio de Industrias trabaja un proyecto de calidad. Pero se requiere más que eso, empezando por una renovación del Secap, el tener más colegios técnicos, más digitalización de documentos y asesoramiento”, explicó.
EL DETALLE En el mundo. Las mipymes a nivel mundial representan un 90 % de todas las empresas que hay, generan un 60 % de los empleos y un 50 % del PIB.
Si se compara a los tipos de empresas con la familia, la mipyme es el hijo que ve la necesidad y se lanza a trabajar en lo que sea. Por lo general no se viste de terno y corbata, a pesar de que el sector genera un 27,49 % del Producto Interno Bruto. En el país son 839.882 que tienen ingresos al año de más de 43 millones de dólares.
El peso en la economía también se lo puede ver por las plazas de trabajo que gesta, un 61,8 % del empleo formal, según García.
Los problemas que enfrenta la mipyme ecuatoriana no difiere de lo que pasa en la región. La Organización Internacional de Trabajo (OIT) indicó que entre los principales obstáculos están la falta de competencias de gestión, sobre todo el acceso a personal calificado y que responda a las necesidades de las empresas. A ello se suma que hay información limitada de servicios de apoyo y poco acceso a datos de los mercados.
Como obstáculos externos están la falta de acceso a la financiación, la informalidad, la infraestructura insuficiente, la inestabilidad política, la falta de claridad y coherencia en políticas de fomento empresarial y normativa, una información limitada de servicios de apoyo, entre otros. Todas estas barreras provocan una baja competitividad y productividad del sector mipymes, según la OIT.
En cuanto a los retos, María Soledad Castañeda, gerenta de Banca Empresas de Banco Procredit, aseguró que estas son las competencias para conseguir una posición en un mercado altamente desarrollado, como el que se avizora, enfocado en la innovación y la digitalización.
Otro reto es lograr una mayor eficiencia en los costos operativos de sus empresas, lo que va de la mano con el primer punto, y también mejorar en la capacitación constante de su personal para poder seguir las tendencias del mercado.
Esto les permitirá asegurar la calidad de sus productos y servicios. “Las empresas deben invertir en sus colaboradores y hacer que la calidad sea su sello. La capacitación, motivación, compromiso, condiciones de trabajo y ambiente laboral son decisivos para asegurar una relación exitosa, excelente y a largo plazo”, dijo Castañeda.
Entre otras necesidades están que los programas sean integrales y tengan un seguimiento. Ronal Toala, dueño de Rogetore & Franco, que elabora compotas de frutas con quinua, puso como ejemplo la norma para dar espacio a los productos de las mipymes en las perchas, de los principales supermercados. Esto se cumple, pero la competencia aún es desigual porque las marcas de las empresas grandes ocupan los puestos más estratégicos.
Toala explicó que para solucionar esto necesita un experto en marketing y puesto que su sueldo es alto se ha unido a otras marcas para contratarlo. Para Toala este es un ejemplo de que la mipyme aún guerrea solo.