La poda será “drástica” con las copas
de Otto Batista, Arístides Vera y Gladys Salvatierra -que constan entre los más afectados- aclara que no lo harán. Primero, porque las grandes plantas fueron podadas en la primera quincena de diciembre, justamente para evitar este tipo de contratiempos. Y segundo, porque el hecho fue provocado por la naturaleza.
“Si lo ocurrido hubiese sido provocado por negligencia nuestra, de seguro responderíamos. Lastimosamente es una cuestión natural, netamente fortuita”.
Ayer, alrededor de las 15:00, el panorama en la avenida Isidro Ayora había vuelto a la normalidad. La vía estaba despejada. El servicio de energía eléctrica, que tras el incidente fue interrumpido y dejó en penumbras a los moradores, se había restablecido en un 98 %. Asimismo, los cerca de 100 técnicos de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) que laboraron de manera ininterrumpida -incluso en la madru- gada- en las cerca de seis manzanas afectadas en Sauces 6, de a poco se retiraban.
“Todo está tomando rumbo otra vez”, señala Otto Batista, uno de los residentes que con el desplome de un poste perdió una de las paredes de su casa.
Él pasó la noche recogiendo escombros en compañía de los miembros del Cuerpo de Bomberos, que también se hicieron presentes para ayudar.
Coincide en que fue un hecho fortuito, aunque afirma que todavía no sale del asombro por lo vivido esa tarde. “Fueron minutos aterradores”, dice, mientras pide a la naturaleza que no les “mande una lección más”.
Para evitar que estos episodios se repitan, el Municipio prevé reducir “drásticamente” la copa de los árboles en algunas zonas.
La medida será analizada en conjunto con el Ministerio de Ambiente, anunció el Cabildo, que agregó que es parecida a la que tomó en diciembre pasado cuando retiró, por razones similares, 44 árboles de La Atarazana.
Esa acción, sin embargo, provocó las críticas de algunos moradores y de grupos ambientalistas.