Cultura del encuentro
la convulsión social continúa creciendo de forma acelerada en nuestra sociedad. como lo dijimos semanas atrás, esto puede ser muy peligroso y atentar contra la paz social de nuestro país.
Así también, la desigualdad, el crecimiento del desempleo y pobreza son signos del deterioro de la sociedad que ponen también en peligro la paz social, la justicia y la democracia. es hora de dar un giro a esta realidad que, por mucho, hunde a costa rica y, peligrosamente, podríamos estar en un viaje sin retorno al país democrático, pacífico y solidario que hemos sido. traigo a colación algunas palabras del papa Francisco, recogidas de su tercera encíclica, presentada el 3 de octubre y titulada “Fratelli tutti” (“Hermanos todos”).
“Por diversos caminos se niega a otros el derecho a existir y a opinar, y para ello se acude a la estrategia de ridiculizarlos, sospechar de ellos, cercarlos (…). la política ya no es así una discusión sana sobre proyectos a largo plazo para el desarrollo de todos y el bien común, sino sólo recetas inmediatistas de marketing que encuentran en la destrucción del otro el recurso más eficaz”, dice el papa en el numeral 15 de esta encíclica. buscar más encuentro y menos enfrentamiento evitará no solo destruir al otro, sino destruirnos a todos. Si el camino sigue siendo el de la confrontación, el insulto y la descalificación, nuestra nación perderá su rumbo. Si la consigna sigue siendo no escuchar ni atender los derechos del otro, se perderá el rumbo de todos nosotros.
Sin bien común, sin la búsqueda del bienestar auténtico de todos, no podremos llegar a buen puerto. tenemos que saber dialogar, ceder. “el individualismo radical es el virus más difícil de vencer. engaña. nos hace creer que todo consiste en dar rienda suelta a las propias ambiciones, como si acumulando ambiciones y seguridades individuales pudiéramos construir el bien común” (“Fratelli tutti”, numeral 105). costarricenses, que Dios nos haga ver claro esto: es el momento de que nos veamos como hermanos.