La Teja

SU MENTE ES UNA FORTALEZA

- Ileana Vargas ilvargas@lateja.cr

La exmodelo Laura Sánchez dejó la pasarela hace cerca de seis años con el fin de cumplir su sueño de ser fisicocult­urista y lo cumplió con creces, ya que el pasado fin de semana se coronó bicampeona del concurso San José Internacio­nal 2019.

No obstante, su decisión le ha costado muchas críticas y comentario­s. Ella nos relató todo lo que ha tenido que enfrentar desde que decidió tornear sus músculos.

Laura reconoció que durante todos estos años lo más difícil no han sido las horas de ejercicio ni las dietas, sino tener que enfrentar durísimas críticas de las personas.

Laura era una de las modelos con más pegue hace unos 10 años, al punto que su agenda de trabajo se extendía a todos los días de la semana.

Ella tenía muchos bretes como bailarina en actividade­s públicas o privadas para diferentes marcas.

“Trasnoch a - ba mucho por el trabajo, era muy delgada y quemaba demasiadas calorías. Fue cuando comencé a entrenar y a llevar una dieta que me ayudaba a tener un peso correcto y a recuperar lo que perdía bailando”, recordó.

Laura desde niña se metió a varios deportes como atletismo, béisbol, fútbol sala y 5, pero fue en el gimnasio donde encontró su mayor pasión: el fisicocult­urismo.

“Los compañeros del gimnasio comenzaron a decirme que los acompañara a las competenci­as y cuando vi todo aquello, los bronceados, los trajes de lentejuela­s y los peinados tan hermosos me enamoré. En ese momento decidí dejar de ser una espectador­a para convertirm­e en una protagonis­ta”, expresó.

Laura no se equivocó y ahora puede rajar que tiene un tanate de premios en fisicocult­urismo.

La también profesora de Educación Física ha alcanzado en los concursos, tanto nacionales internacio­nales, casi siempre el primero o segundo lugar.

Aunque se ha esforzado en un montón de competenci­as, recuerda como si fuera ayer la primera en la que participó. “Solo tuve seis semanas para prepararme, me tiraron contra contrincan­tes que tenían hasta seis años en categorías de pesas, nadie daba un cinco por mí. Y esa vez quedé como subcampeon­a”, recordó emocionada.

Esfuerzo. Laura, de 37 años, también estudia y actualment­e cursa una maestría en Gerencia del Deporte.

Súmele que hace dos años abrió su propio gimnasio, Evolve, en Desamparad­os. Pero no todo ha sido color de rosa, el camino ha estado lleno de espinas.

“Desde que comencé hasta hoy recibo críticas, desprecio y burlas”, expresó.

La deportista confesó que antes esos señalamien­tos la afectaban mucho, pero aprendió a que le resbalen.

“Dicen cosas como: ‘¡Qué asco!, ¡Parece travesti!, ¡ Parece un hombre!’, yo no entiendo cómo una persona que no me conoce se atreve a juzgarme así. Aprendí con madurez y se guridad que esos comentario­s no tienen que afectarme. Aprendí que contar con el apoyo y el amor de mis papás, mi novio y mis amigos es lo más importante. Con madurez aprendí a estar en paz porque no le estoy haciendo daño a nadie con hacer deporte ni con tener más musculatur­a que el promedio de mujeres e incluso de hombres”, comentó.

“Ahora ni me interesan esos comentario­s, creo que las personas que los hacen deben estar perturbaba­s, tienen envidia o son ignorantes, así que ahora no le presto oídos a eso. Las personas que ofenden o me di

Puedo decir que estoy mejor que nunca, que estos últimos 6 años han sido los mejores de mi vida”.

Laura Sánchez Fisicocult­urista

13 premios ha ganado en competenci­as de fisicocult­urismo

cen este tipo de comentario­s me dan lástima, y no es por jugar de viva, pero aprendí a no darles importanci­a”, añadió. Confesó que también ha tenido que lidiar con el tema de su edad, porque para muchos su inicio en este deporte comenzó muy tarde.

“Yo empecé a los 33 y ya casi estoy llegando a los 38 años y no me siento vieja. Lo que dice la cédula solo es un número”, aseguró.

Las duras críticas quedan en el olvido cuando la deportista ve los maravillos­os resultados en los clientes de su gimnasio. “Eso me motiva, ver cómo puedo ayudarles a las personas no solo a hacer un cambio físico, sino emocional y mantenerlo­s con la autoestima al tope. Es maravillos­o cuando un cliente que no hacía nada me cuenta que logró subir el Chirripó o cuando un clienta me dice que volvió a tener intimidad con su esposo porque ahora se siente más segura”, contó. Tanto así, que sigue con mucho impulso y más enamorada que nunca del fisicocult­urismo. Laura tiene claro que quiere seguir sacando más caja.

“Mi propósito para el próximo año es participar en competenci­as internacio­nales y sacar mi carné profesiona­l en fisicocult­urismo”, dijo toda ilusionada.

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CORTESÍA Laura era muy delgada, pesaba 47 y ahora pesa 67 kilos de pura fibra.
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CORTESÍA. CORTESÍA. FOTO: NAVÉGALO Así se veía Laura en su época de modelo.

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